6A LaPrensa Panamá, jueves 8 de junio de 2023 Opinión Los artículos de opinión y las caricaturas son responsabilidad exclusiva de los autores. La opinión deLaPrensase expresa únicamente en el Hoy por Hoy. [email protected] Las colaboraciones para la sección de Opinión deben incluir la identificación del autor. Los artículos no deben exceder 500 palabras. No se publican colaboraciones que hayan aparecido en otrosmedios y La Prensase reserva el derecho de seleccionar, editar y publicar. No devolvemos el material. Fundado en 1980 Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa Presidente fundador Roberto Eisenmann Jr. Director emérito Guillermo Sánchez Borbón † Presidente Diego Quijano Durán Directora Editorial Rita Vásquez Jefe Editorial Mónica Palm Asesor de investigaciones periodísticas Rolando Rodríguez Editores Juan Luis Batista, Yolanda Sandoval, Eliana Morales, Aleida Samaniego Gerente General Juan Carlos Planells Gerente de Producción, Logística y Administración Basilio Fernández Gerente de Ventas y Comercial Sudy S. de Chassin Esta es una publicación de Corporación La Prensa, S.A. ©. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción, sin la autorización escrita de su titular. ISSN 2953-3252: La Prensa ISSN L 1605-069X: prensa.com No hemos avanzado Pride BettyBrannanJaén [email protected] Días atrás, cuandoponderaba qué escribir enestaprimera columnade regresodespués de 10años de ausencia enestas páginas,me topé con la siguiente citadeMartinLutherKing. “Si no puedes volar, corre. Si nopuedes co - rrer, camina, y si nopuedes camina,r entonces gatea. Delmodo que sea, tienes que seguir avanzando ”. (1967) King se refería, por supuesto, a la grancausade suvida: la luchapor la igualdaddederechos paar los afro - descendientes enEtsadosUnidos. Ahora,medio siglomás tarde, da ver - güenza constatar comoodio, racis - mo y crueldad sirvieronparanegarle derechos fundamentales a los afroamericanos, pormuchas décadas después deque sehubiear abolido la es - clavitud. Triste es constatar que el racismo todavía infectamuchos as - pectos de la vida enEstadosUnidos. Sinembargo, gracias aKing y al movimientoque lideró, no solamente seha avanzado enEstadosUnidos enmateriade igualdaddederechos, sinoque las sociedadesvaanzadas hancomprendidoque la igualdadde derechos ante la leyno soncosade razani de etniani de género. Tampo - code estatus socioeconómico, atri - butos físicos uorientación sexual. Es simplemente cosadederechos humanos.Ningúnpaís ha llegadoa la perfecciónenmateriadederechos humanos, pero los países demyaor desarrollohan idoavanzando en to - dos esos renglones, aunque sea gateando. Siendo elmes dePride, abordaré primero los derechosLGBTIQ+. Cuandodejéde escribir en2103, el matrimonio igualitario ear legal en 17países, incluyendoEspaña, Argentina,Uruguay, Francia, Brasil, Inglaterra yMéxico.De allí, siguie - ronEscocia yLuxemburog (2014); Finlandia, Irlanda, Groenlandia y EstadosUnidos (2015); Colombia (2016);Malta yAustralia (2017); Austria, Taiwán, Ecuador e Irlanda delNorte (2019), yCostaRica (2020).De los países delG,7Japón es el únicoque aúnno loha intsitui - do, pero varios tribunalesaj poneses han falladoque estaomisiónes una violacióndederechos humanos yhya encuestas que señalanque 70%de los japoneses está a favor depermi - tirlo.Oseaque Japónestá atrasado eneste tema, perogateandohacia adelante. YenPanamá, ¿hemos avanzado so - brematrimonio igualitario?Ni un milímetro. Envez de gastar tinta y tiempo criticandoaunaCotreSu - prema cobarde yplagadademediocridad, irédirectamente al grano: las leyes sonel reflejode su sociedad. Esta es una verdaddesagardableque explicamuchos denuetsrosmales. Enel caso especíifcodederechos LGBTIQ+, nuestras leyes estánatra - sadas porquenuestras actitudes es - tánatrasadas.Hace años vi una en - cuestaque señalabaque enPanamá solo el 12%de lapoblaciónaprueba delmatrimonio igualitario. (Con - trasteneso conel 70%de aprobación enJapón, una sociedad tardicional y conservadora). Si hay encuestas o hechos quemuestrenavance enPa - namá, agradeceréqueme los envíen, para así consolarme con la ideade que estamos gateandohacia adelan - te, aunque seamilimétricamente. Justicia es otro tema fundamental dederechos humanos y allí tampoco hemos avanzadodesde 1990, cuan - domi primera columna enestedia - rio criticó severamente el sistemade justiciapenal.Otra vez, no voy amal - gastar tinta y espacio comentando el triste espectáculoque vimos la se - manapasada enel juiciodel caso NewBusiness. Solo repetiréque las leyes son reflejode su sociedad. Si te - nemos un sistema absurdo, anacró - nico, desigual e inopearnte –sin mencionar corrupto — es porquehe - mos escogido tenerloasí ynonos importa seguir teniéndoloasí.Nos en - tretenemos con juicios “show”sin poner debida atencióna todas las otras fallas denuestra justicia, como por ejemplo las graves violaciones de derechos humanos ennuetsras cár - celes (cosaquedenuncié repteida - mente enmis 23años como columnista aquí). Les recomiendobuscar unexcelente artículo en lapágina webde LaEstrella, titulado “Tumba de los vivos ”. Terminaré conotro temadederechos humanos dondeno solamente nohemos avanzado, sinoquehemos retrocedido: democracia. EnPana - má, segúnencuestas hechas cadados años porLatinobarómetro, el apoyo a lademocraciaha caídodesde elif - nal de ladictadura. Enel año 1996, 75%de los encuestados panameños opinóquedemocracia es lamejor formade gobierno; pero en2020, so - lo35%respondióasí. Si ni siquiear nos importa tener democracia, esta - mos perdidos comopaís. ¿Quénos correspondehacer?Retomar laobligaciónde seguirvaan - zando en tornoa los derechos humanos, y apaso rápido. Si no, tendremos que aceptar otar verdaddesa - gradable: cadapueblo tiene elog - biernoquemerece. Cuando dejé de escribir en 2013, el matrimonio igualitario era legal en 17 países. LAAUTORA es abogada y periodista jubilada ¿Panamá debe derogar el Tratado de Montería? Colombia DiegoEspinosaG. [email protected] ¿Existirá alguna razónparaque Panamámantenga vigente el TratadodeMontería?Mepa - recequeno. Ese oprobioso tar - tado se firmó, encondiciones prátci - camente impuestas al pueblopana - meño, sin tomar encuenta las tensas que sehanpuesto las relaciones di - plomáticas conColombia, poqrue su canciller, dentrode su ignorancia inexcusable, todavía creequePana - mápertenece a laRepúblicadeCo - lombia, al referirse anuestropaís co - mo “Departamento ”. Los beneficios otorgados por laRe - públicadePanamá aColombia se es - tablecieronenel TratadoUribeVar - gas-Ozores, suscrito el 23de aogsto de 1979, paraquepasengratuita - mente los barcos de guerardeCo - lombia, incluyendo los derechos de tránsitopor el ferrocarril, siempre que esté contemplado el tránsitopor el canal dePanamá. La firmade ese tratado y los benefi - cios otorgados estánen la cláusula VI del TratadodeNeutralidadPer - manente y al Funcionamientodel Canal dePanamá.MientrasEstados Unidos tuvo la responsabilidadpor el funcionamientodel canal, podía otorgar a laRepúblicadeColombia, libredepeajes, el tránsitopor el canal de sus tropas, naves ymateriales de guerra. (Recuerdenque las tropas norteamericanas se retiraronel 31 dediciembrede 1999). Posteriormente, laRepúblicade Panamápodráotorgar a laRepúblicadeColombia ydeCotsaRica el de - rechoal tránsito libredepeajes de sus barcos de guerra. No se sabe concertidumbre si Es - tadosUnidos, usando supoder de negociación, quisodarleunpremio de consolaciónaColombia, por aquellode la separación forzosadel istmodePanamá, enaquel tiempo DepartamentodePanamá, loque permitió terminar de contsruir el ca - nal iniciadopor la compañía farnce - sa a cargodeFernandodeLesseps. Ciertamenteque el gobiernode Colombianoquedómuy contento conque le arrebataranal descuidado DepartamentodePanamá y, aunque hicieron sus escaramuzas para evi - tarlo, se impuso el poder de la fuerza, aunquedicenque los indemnizaron con 10millones dedólares. Yuna pruebade ello es que enel esucdode Colombia todavía aparece agregado elmapade laRepúblicadeaPnamá. Cuando se ratificó el tratadode Montería, por laAsambleaNacional deRepresentantes deCorregimiento, el gobiernodePanamá, abusando del poder yde labuena fede los honorables representantes, envióal Esta - doMayor de laGuardiaNacional a estar presente enel hemiciclo legislativo, todos ibanvestidos deblan - co,me imaginoquepaar presionar y garantizar la aprobacióndel Tratado deMontería, y evitar que fuera re - chazado. Ese sólohecho es causade nulidadyde laderogaciónde ese oprobioso tratado impuestoal pue - blopanameño, yano solopor foráneos, sinopor sus propiosogbernan - tes. Se tejenalgunas teorías conspiar - tivas sobre el interés del general OmarTorrijos en la aprobaciónde ese tratado, comopor ejemploque sus padres erancolombianos, que te - níamuchas amistades colombianas o el pago enagradecimientoal en - tonces presidentedeColombia, AlfonsoLópezMichelsen, por suapoyo en la firmade los tratadosTorrijos Carter. Comoque sehacía fácil andar regalando los bienes del puebloa foráneos sinninguna reciprocidadde Colombia. Lo ciertoque los tiempos hancambiado. Las correlaciones de fuerzas políticas, el surgimientodenuveas potenciasmilitares y económicas, los estragos del cambio climático y la escasez de agua, nos llevanauna nueva realidad, quehacen incotsea - blepasar barcos demaneargratuita. Llegó lahoraque el gobiernopana - meño ejerza su sobearnía ydepor terminado ese innecesario tartado que ennadabeneficia al pueblopa - nameño. Los beneficios se establecieron en el Tratado Uribe Vargas- Ozores, suscrito el 23 de agosto de 1979, para que pasen gratuitamente los barcos de guerra de Colombia por el canal. EL AUTOR es docente y escritor La corrupción nos roba la educación Fondos públicos JorgeBloise Iglesias [email protected] Panamá enfrentadesaífos significati - vos enmateriade corrupción, conca - sos de altoperfil quehangenerado desconfianza enel sistemapolítico y en las instituciones públicas. Enmi cami - nar por SanFrancisco, JuanDíaz, Parque Lefevre,DonBosco yRíoAbajo, he esuccha - do voces de frustraciónyhastío.Merecemos cambios sustanciales queponganifna la co - rrupción. La faltade transparencia y rendiciónde cuentas es unapreocupación recurrente, porque la corrupciónnos afetca a todos. Se calculaque la corrupciónnosucesta entre $500millones y$1,000millones por año. Eso es entre 1%y2%del PIBpanameño. La corrupción reduce los reucrsos dispo - nibles para invertir en las necesidades de los panameños, como lamejoarde las instala - ciones educativas y laprovisiónde alimen - tos adecuados para los niños enedadesco - lar. Además, resulta en la escasez de reucr - sos destinados a la formaciónydesarrollo profesional de los educadores ynonos permite evitar ladeserciónescola.rLa calidad educativa es baja y lodemuestra el índicede calidadde vida, quemarcanque9de cada 10 estudiantes depremediano supearn las pruebas dematemáticas. La corrupciónnos está robando la educa - ción. Veámoslo enunejemplo: hacepoco comenzóa funcionar la esucelaErnestoLe - vefre, que cuenta con50aulas, laboartorio, gimnasio, cámaras de seguridadymás. La renovacióncompletadel colegio costó$9.2 millones. Eso significaque con los$1,000millones que sepierdenpor añoporuclpade la co - rrupción, sepodríancontsruir 108escuelas equivalentes a estediseño. Teniendo en cuentaquemuchos colegios necesitanuna inversiónmenor en infarestructura, po - drían sermuchasmás las benfeiciadas. Si nonos alertaque solo en2022 se rteira - ronunos 20,110alumnos, en sumyaoríade la enseñanzaprimaria, seríamos cómplices. Las estrategias integrales, que vandesde asegurar la alimentaciónescola,rimple - mentarmodalidadeslfexibles, inversión ro - busta en tecnología e innoavción, sonalgu - nas de las oportunidades que sepierdena causade la corrupción. Hayque entender que sepodría llegar a impactar a todos los estudiantes ydocentes que estándentro y fueradel sistema educa - tivo. La corrupciónestá afectandounode los derechos fundamentales de laniñez, el accesoauna educaciónde calidad. nUos po - cos aprovechany realizanmaniobars ilega - les, sin ser juzgados, paar quedarse condi - neroqueno les pertenece y se conviertenen ladrones del futurode los niños yniñas de Panamá. EL AUTOR es precandidato a diputado independiente
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