revistak_20211018

_22 1 0 . 2 1 zonak_ L a marca Kyocera llegó a Marte hace 10 meses, pero no como estamos familiarizados a verla en las oficinas con máquinas impresoras y multifuncionales, sino en los compartimentos de cerámica fina donde se ubican los microprocesadores que hacen que el robot Perseverance haga su trabajo. El listado donde Kyocera tiene presencia es muy largo e importante, por ejemplo, las lámparas de una sala de cirugía llevan componentes Kyocera, así mismo los instrumentos de corte, una diversidad de herramientas en la ciencia y la tecnología, y hasta los paneles LCD táctiles tan comunes en nuestro entretenimiento. En realidad la historia empezó casi ahí, en los antepasados de las pantallas LCD, cuando en 1959 el brillante emprendedor Kazuo Inamori creó la empresa y tuvo el encargo de producir tubos catódicos para televisores. C on tanta especialización, es fácil entender que las máquinas de impresión Kyocera, claves del entorno laboral, tienen un enfoque más allá. Mucho antes de que la pandemia nos alejara del lugar de trabajo, estos dispositivos se habían especializado en la digitalización avanzada de documentos por medio de softwares, encaminadas a la gestión de archivos facilitando la tarea digital. Esta unidad de desarrollo llamada Kyocera Documents Solutions, es liderada en Miami por Maria Puig en la rama de Corporate Marketing, Rodrigo Almarza, Gerente regional de Ventas y Walter Mehlig, Gerente de Soluciones, quienes visitaron nuestro país en su primera gira presencial para reunirse con Omicron, el distribuidor de la marca en Panamá. “usas nuestra cerámica T E X T O / / / L U C E R O MA L D O N A D O F O T O S / / / J A I R O C O UM E L I S 50 veces al día”