2020-12-01

alma, embajadora certificada de WFTA, defiende el rol de las mujeres en esta tendencia del turismo gastronómico. Y resalta su sacrificio evolutivo. “Por mucho tiempo el hombre cazó y la mujer tomó eso que se cazaba para darle un valor agregado. La cocina lo transformó en una forma sabrosa de legar la cultura y el patrimonio culinario a sus hijos, y el turismo visibiliza esta exquisita dinámica, que el viajero gastronómico valora y respecto de la cual, está dispuesto a pagar para vivir”. El relato procedente de abuelas y madres se constituye en “un poderoso ingrediente” de los emprendimientos que involucran alimentos y bebidas, por lo que sus descendientes hicieron un acopio de saberes culinarios que tienen como base la identidad. Por este motivo, dice, las mujeres de América Latina tienen mucho que decir en materia de turismo gastronómico. Un relato que ellas escriben todos los días en su lucha por derrotar la desigualdad y la pobreza, dándole a la mujer, el lugar que se merece en la historia como un motor de positiva transformación sostenible para un mundo mejor. Texto: Oscar Castaño Óscar Castaño, abogado y periodista económico. Ha publicado artículos en publicaciones panameñas y en el exterior. Ganador del Premio Fórum de Periodismo y del prestigioso premio Simón Bolívar en Colombia. d [ I G L E S I A C O N TAO E N H O R N O P I R É N , C H I L E . 33 opinión