revistak_2020_08_06

tiene una gran maestra en su madre , ¿ qué le aconseja ella ? ¡Mi mamá es un personaje! Ella tiene su manera especial de transmitir sus consejos y enseñanzas, que son muchísimas. Siempre el despertarse con un propósito, especialmente en estas épocas tan inciertas. Vivir siempre a todo color, y si es rosado, mucho mejor. La mesa es para compartir, y cocinarle a alguien es un acto bondadoso que requiere de humildad. El trabajo no siempre será fácil, pero esa milla extra siempre va a valer la pena. ¿ qué restaurantes fuera de panamá ha conocido , que sean fuente de inspiración ? tanto en gusto como en el modelo de negocio . He viajado y conocido muchísimos restaurantes, pero prefiero restaurantes pequeños donde el Chef no haya crecido lo suficiente como para delegar su cocina. Me identifico mucho más con ese modelo de negocio y ese sentido de detalles y cariño que se transmite en cada plato. ¿ quién dirige la parte estética de las presentaciones de su marca alacena ? La parte estética es un balance entre el estilo único de mi mamá con un toque moderno y sencillo que aportamos las generaciones jóvenes. La identidad visual de Alacena la pudiera considerar como el puente entre ella y yo. Es una marca en la que las dos nos identificamos. Para crear esta identidad y marca nos apoyamos en el esfuerzo de tres otras mujeres que forman parte de nuestro Dream Team; Julieta Ledezma, Alexandra Vallarino y k 18 Vivi De Castro, indispensables en este emprendimiento. Gracias a este equipo maravilloso, se logró crear y darle la personalidad que necesita. ¿ cuál sería el tour ideal para que panamá muestre al mundo su diversidad , cuando sea pertinente el turismo ? Hay tres lugares que siento que son básicos para entender nuestra gastronomía. Siempre he oído decir a mi mamá que Panamá sabe a mar, monte y frutas tropicales, y basado en eso pienso que cualquier persona interesada en explorar nuestra gastronomía debe enfocarse en esos sabores. La gastronomía del área del caribe, con sus sabores atrevidos, sus mariscos y esa mezcla maravillosa de coco y picante. Las tierras altas de Chiriquí nos brindan toda clase de productos frescos y por supuesto su café. La ciudad nos ofrece la mezcla de culturas y cocinas internacionales que se revuelven en este único fogón que somos Panamá. Un crisol de razas y puente del mundo lleno de colores y cosas lindas que ofrecer.