Marzo 2020

¿Cómo se concertó su visita a Panamá para el IFF? Había sido invitado anteriormente un par de ocasiones, a través de Chema Prado, un viejo amigo mío y de mi esposa, que dirigió muchos años la Filmoteca Española. Pero no había podido asistir porque siempre estaba trabajando. Este año estoy libre, así que iré para dictar una clase magistral y mostrar un filme en el que actúo y que hice solo para hablar del propósito del filme: si era una buena idea hacer lo que estaba intentando hacer, qué pude haber hecho distinto y realizar un examen minucioso del filme. ¿Cuánto tiempo se quedará en Panamá? Me quedaré unos cuatro días, después iré a Los Ángeles. Actores de renombre han hecho la transición del cine a la TV. Ahora usted actúa en las series ‘Billions’ y ‘The New Pope’. ¿La TV atraviesa su segunda época dorada? No sé. Creo que hay series de televisión maravillosas por todo el mundo. La televisión es más efectiva y mejorada por cómo la gente mira su contenido en la actualidad. Aunque la gente todavía va al cine y, tal vez, ahora va más gente que antes, no tengo idea, pero es un público muy diferente. Me refiero a un público más joven que va a ver películas basadas en los cómics de Marvel o películas infantiles. No creo que haya un grupo masivo que vaya a ver películas para un espectador maduro y adulto. Ese público ve mucho más cosas en la web o en series de TV que en el cine. Al menos, eso es lo que he escuchado, no sé las cifras exactas. A ctualmente, más gente opta por ver cosas en su casa o en la de un amigo o colega, que ir a un cine. Eso parece. En 1972, si quería ver ‘Last Tango in Paris’, yo tenía que manejar 300 kilómetros a una sala de cine. Luego, llegó el VHS y ya no tenía que manejar tan lejos, la podía ver un año más tarde en el televisor. Después, los DVD lo hicieron más posible, y muy pronto la urgencia de ver una película desapareció. La diferencia que hicieron [las plataformas ‘streaming’] es que interesaron al nicho de personas del mercado que les gusta quedarse en su casa un sábado y ver una, dos, seis u ocho horas de una serie. Esa democratización, por la falta de una mejor palabra, dio opciones y llenó una verdadera necesidad en el mercado. ¿Seguirá siendo así por siempre? No tengo idea, no soy vidente, pero ciertamente hizo un cambio. Sin lugar a dudas, en 8 o 10 horas de una serie de televisión uno puede profundizar en muchos más detalles, personajes secundarios, terciarios, de reparto y cameos, y ver la historia y los personajes desde la mayoría de los ángulos. Puedes extender esa serie por cinco años. Las películas son de 80 o 90 minutos, a veces de dos horas y media. Ocasionalmente unas duran tres horas y media y la gente suele quejarse al respecto, sin embargo, ven televisión durante 10 horas… Personalmente, prefiero mucho más las películas, pero también me gusta un poco ver 10 episodios de un buen guion con un buen director o directores. F E S T I VA L I N T E R N AC I O N A L D E C I N E D E PA N AMÁ