6A La Prensa Panamá, miércoles 22 de octubre de 2025 La justicia según Mulino Sabrina Sin Censura Sabrina Bacal [email protected] Y es que la justicia tiene distintos nombres para Mulino. Cuando procesa a su círculo cercano es “persecución”, pero cuando apunta hacia sus adversarios, es “debido proceso”. Un doble estándar que no resiste el menor contraste con los hechos, y que amenaza con hacer añicos la poca independencia judicial que queda. El mandatario creó la Unidad de Coordinación Legal para que las instituciones afectadas por delitos contra la administración pública se conviertan en querellantes ante el Ministerio Público. Asegura que es muy distinta a la “procuraduría paralela” de Varela, pues no ha contratado ninguna firma de abogados. Pero ese no es el mayor de los pecados, ni entonces ni ahora. El vicio fue y sigue siendo la parcialidad de una justicia comandada desde el Ejecutivo. La nueva oficina estará adscrita al ministerio de Gobierno. Su titular Dinoska Montalvo, ha sido además abogada de Frank De Lima, enjuiciado por las coimas de Odebrecht. ¿En qué país puede una ministra ser abogada de imputados por delitos contra la administración pública y, además, liderar un esfuerzo que pretende enjuiciar a los culpables de tales ilícitos? Pues en el país donde el mandatario da distintos nombres a la justicia, según quien sea el procesado. En el caso de Frank De Lima, por ejemplo, podemos imaginar que el presidente lo catalogaría como “perseguido”. Fue su compañero de gabinete en el gobierno de Martinelli, y su esposa trabaja actualmente en la Presidencia. Como otros del círculo cero de Mulino, su camino a la absolución parece pavimentado. ¿No sería más eficiente —y generaría menos suspicacia— exigirles a todos los funcionarios que cumplan con su rol? Los ministros y directores de entidades están obligados por ley a denunciar ante el Ministerio Público cualquier posible irregularidad. Para ello cuentan con decenas de asesores legales. Si necesitaran más apoyo, ahí está la procuradora de la Administración, cuya función principal es “defender los intereses del Estado”. Por cierto, ¿alguien sabe qué fue de Grettel Villalaz de Allen? Aquí no falta personal ni instituciones, sino voluntad. Pero la mayor desfachatez de todo este asunto es la justificación presidencial para la creación de la Procuraduría Paralela 2.0. Mulino aseguró que la misma busca combatir el “sentimiento generalizado de impunidad”. ¿Será consciente el mandatario de cuánto ha contribuido él mismo a esa percepción que dice querer combatir? De entrada, llegó al poder de la mano de un condenado por lavado de activos que disfruta su libertad en Colombia. Ya en el cargo, usó sus facultades constitucionales para reducir penas a exsubalternos, como los policías condenados por el asesinato de los jóvenes en Tocumen. Más recientemente, un video oficial mostró al arquitecto George MoBombas atómicas en Darién para un nuevo canal: Tratado Robles-Johnson José Rodríguez [email protected] PONLE LA FIRMA El intento de Marco Aurelio Robles por asegurar la soberanía panameña derivó en los tratados Robles-Johnson, que proponían incluso usar bombas atómicas para abrir un canal en Darién, antes del golpe de 1968. Tras los sucesos del 9 de enero de 1964, asumió la presidencia Marco Aurelio Robles, apodado “Marco Rifle” por darle fusiles a la guardia nacional y la orden de “disparar primero y preguntar después”. Desde su llegada, tenía la misión de negociar un nuevo tratado con Estados Unidos. Panamá, bajo Robles, buscaba la total soberanía sobre Panamá, incluyendo la zona del Canal. Mientras que Estados Unidos, bajo Lyndon B. Johnson, veía el Canal de esclusas como obsoleto y vulnerable a ataques. Después de tres años de negociaciones secretas, se aprobaron los textos de los tratados Robles-Johnson, o los “3 en 1”, como se les conocía. El primero era el Tratado del Canal, que eliminaba el Hay-Bunau Varilla y reconocía a Panamá como soberana en toda la Zona del Canal, que ahora se llamaría “Área del Canal”. Sin embargo, el canal lo administraría una junta directiva de cuatro panameños y cinco estadounidenses, y el traspaso se haría poco a poco a manos panameñas. El segundo establecía que ambos países tenían la responsabilidad de proteger el canal y mantenerlo neutral. El tercero autorizaba a Estados Unidos a construir un nuevo canal a nivel del mar, utilizando bombas atómicas en Darién. La razón de esta propuesta era que, poco después de terminada la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos buscaba rutas para construir otro canal entre el Pacífico y el Atlántico. Había identificado 30 posibles opciones desde México hasta Colombia. Pero conociendo el poder destructivo de las bombas atómicas utilizadas en la guerra, comenzaron a evaluar si había manera de usarlas con fines positivos o pacíficos. Uno de estos posibles usos era la excavación, y cuando surgió la posibilidad de construir otro canal, eligieron la ruta 17 de Sasardí–Mortí, en Darién, como la más viable. Sin embargo, hubo controversia por las fechas de entrega. El tratado del canal establecía el traspaso completo en 1999, aunque podía extenderse hasta 2009 bajo ciertas condiciones. El nuevo canal a nivel del mar por Darién tendría vigencia hasta 2067, lo que podía extender la presencia estadounidense por 100 años más. Cuando el proyecto llegó a la Asamblea, miles de personas salieron a protestar en contra. La presión fue tanta que el presidente Robles tuvo que retirar el proyecto de ley un mes después. Así terminaron los esfuerzos para que el Tratado Robles-Johnson fuera aprobado. Con el Tratado Robles-Johnson fuera de escena, meses después se celebraron nuevas elecciones presidenciales, en las cuales Arnulfo Arias Madrid resultó electo, con el apoyo de Bolívar Vallarino, de la Guardia Nacional, bajo la condición de que no intervendría con ella. Pero cuando Arias tomó posesión, hizo cambios en las trece zonas militares del país: movió a tres capitanes, trasladó a diez mayores y envió a otros militares al extranjero, buscando neutralizarlos. El viernes 11 de octubre de 1968, a solo once días de haber asumido el cargo, mientras veía una película en el teatro Lux, en la avenida Perú, le susurraron al oído: “Doctor… nos tumbaron”. Salió del cine en dirección a la Presidencia, pero ya era demasiado tarde. Tomó rumbo a la Zona del Canal, de donde posteriormente fue exiliado a Miami. Los impulsores de este golpe eran parte de los militares que Arias quería mover. El principal era el mayor Boris Martínez y le seguía un militar que se había destacado por reprimir una manifestación estudiantil en Cerro Tute, Veraguas, llamado Omar Torrijos Herrera. Así comenzó uno de los periodos más controversiales de la política moderna panameña: la dictadura militar. Yaritza Mojica [email protected] En años anteriores hubo desfiles en calle 50. Alexander Arosemena Vía España y Casco Antiguo, escenarios clave en la ruta de los desfiles patrios CELEBRACIONES El Ministerio de Educación (Meduca), junto con la Comisión de Desfiles Patrios y los estamentos de seguridad, anunció las rutas y medidas logísticas para los desfiles patrios del 3 y 4 de noviembre de 2025. Este año se habilitarán dos recorridos principales: el primero en el Casco Antiguo, frente a la Presidencia de la República, y el segundo en la Vía España, que vuelve a ser escenario de las festividades tras 14 años. La Ruta 1, en el Casco Antiguo, albergará más de 40 delegaciones —entre centros educativos, bandas independientes y cuerpos de seguridad—, mientras que la Ruta 2, en Vía España, contará con 45. Los desfiles del 3 de noviembre, con motivo del 122.º aniversario de la separación de Panamá de Colombia, comenzarán a las 9:00 a.m. en calle tercera, Parque Simón Bolívar, y concluirán en avenida Balboa. El día siguiente, 4 de noviembre, Día de los Símbolos Patrios, las actividades iniciarán a las 8:00 a.m. en la intersección de la Iglesia del Carmen y culminarán en la Caja de Ahorros. El regreso a la Vía España se decidió por la accesibilidad y facilidades de transporte que ofrece el Metro de Panamá —con estaciones cercanas en Iglesia del Carmen y Vía Argentina—, lo que permitirá reducir la congestión vehicular. Las delegaciones tendrán un máximo de 30 agrupaciones, entre escuelas y bandas. Los desfiles están regidos por el Decreto 708 del 23 de agosto de 2010, que regula la participación de delegaciones y la organización general de las festividades. En cuanto a la venta de alimentos, la Alcaldía de Panamá emitió 166 permisos distribuidos entre ambas rutas: 55 puestos fijos en el Casco Antiguo, 83 en Vía España y 30 permisos ambulantes. Los vendedores deberán exhibir un código QR y cumplir con los requisitos sanitarios del Ministerio de Salud (Minsa) y del Cuerpo de Bomberos. Quienes no cuenten con los permisos no podrán operar. El Minsa desplegará dos puestos de atención médica y ambulancias activas desde las 7:00 a.m. hasta las 11:00 p.m. Los manipuladores de alimentos deberán contar con sus carnés blanco y verde vigentes. Personal de salud pública y saneamiento ambiental realizará inspecciones a lo largo de los recorridos para evitar intoxicaciones y garantizar la inocuidad de los productos. También habrá personal médico, enfermeras y técnicos en urgencias para atender casos de deshidratación y otras emergencias. Por su parte, los estamentos de seguridad coordinarán un centro de operaciones para vigilar el orden y el flujo vehicular durante ambos días. La Policía Nacional, el Cuerpo de Bomberos, el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) y la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre participarán en los operativos. Las autoridades invitaron a la ciudadanía a participar con civismo en las celebraciones, respetar las medidas establecidas y colaborar para mantener un ambiente seguro y familiar. Con estas disposiciones, los desfiles patrios 2025 buscan resaltar el orgullo nacional y recuperar la tradición de celebrar las fechas históricas de Panamá en espacios emblemáticos del país. reno —condenado por el caso Blue Apple— recorriendo campante, junto a sus hijas, la Villa Diplomática. Y más allá de estos casos, el país ha presenciado un verdadero baratillo judicial del que han disfrutado otros personajes cercanos al poder. ¿No piensa el presidente que estas excepciones y privilegios también alimentan la percepción de impunidad? Si algo queda claro con los dobles estándares de Mulino, es que su gobierno no defiende principios —como la justicia independiente, la lucha contra la corrupción o la defensa del Estado de derecho—, sino intereses. Y mientras el poder se siga administrando desde esa torcida lógica, seguiremos viviendo en el país donde la justicia cambia de adjetivo según quién sea el acusado. José Raúl Mulino hizo campaña como víctima de la supuesta persecución política orquestada por el expresidente Juan Carlos Varela, pero al llegar al poder quedó claro que su conflicto no era con la utilización de la justicia como un arma política, sino con el rol que le había tocado jugar. Su problema era ser perseguido y no perseguidor. la presidencia Mar co Aurelio Robles, apoda do “Marco Rifle” por dar Desde su llegada, te nía la misión de ne gociar un nuevo trata esclusas como obsoleto y vul Después de tres años de ne gociaciones secretas, se apro baron los textos de los trata Hay-Bunau Varilla y recono cía a Panamá como sobera
RkJQdWJsaXNoZXIy MTUxMjQ5NQ==