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7A La Prensa Panamá, miércoles 9 de julio de 2025 Contacto [email protected] Los artículos de opinión y las caricaturas son responsabilidad exclusiva de los autores. La opinión de La Prensa se expresa únicamente en el Hoy por Hoy. mente y sean críticos respecto al ejercicio de sus derechos y al cumplimiento de sus deberes. Sin una ciudadanía participativa, el poder político no conocerá la rendición de cuentas ni los mecanismos de control, y el valor del voto se reducirá a un simple acto de elección. Es penoso ver cómo algunos ciudadanos reducen nuestra democracia a elecciones cada cinco años, dejando de lado los elementos que realmente fortalecen la ciudadanía, como mantenerse informados, tener sentido de compromiso comunitario y actuar de acuerdo con principios éticos y morales. Por esta razón, la educación cívica se convierte en un factor clave para la recuperación de la sociedad en tiempos de crisis democrática, ya que promueve el respeto por las normas, reduce la corrupción, fomenta la participación activa en la vida política, impulsa la cohesión social y fortalece los valores y principios necesarios para generar estabilidad institucional. Más allá de todo lo mencionado, el desarrollo del pensamiento crítico en los ciudadanos es vital para lograr un verdadero cambio social. Permitir que las personas puedan identicar noticias falsas, discursos populistas o medidas autoritarias constituye uno de los mayores retos de la modernidad. En tiempos donde damos todo por sentado o por cierto; donde “mi verdad” surge como contraposición a “la verdad”; donde los medios de comunicación ya no comunican, y las redes sociales se convierten en la princiLas colaboraciones para la sección de Opinión deben incluir la identificación del autor. Los artículos no deben exceder 650 palabras. No se publican colaboraciones que hayan aparecido en otros medios y La Prensa se reserva el derecho de seleccionar, editar y publicar. No devolvemos el material. La eliminación del Ministerio de la Mujer Equidad de género El gobierno anunció la eliminación del Ministerio de la Mujer, una medida que ha generado amplio debate en los ámbitos político, social y de derechos humanos. Según el comunicado ocial, las funciones de este organismo pasarán a desempeñarse dentro de una nueva Secretaría de Equidad de Género, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social (Mides). ElMinisteriodelaMujerfuecreadoconelobjetivo de promover políticas públicas para la equidad de género, prevenir la violencia contra las mujeres y garantizar el acceso igualitario a derechos. Su transformación en una secretaría bajo el Mides responde, según el Ejecutivo, a un proceso de “racionalización del gasto público” y “reorganización institucional para mayor eciencia”. La decisión forma parte de un paquete de reformas estatales que incluye la fusión y supresión de diversos organismos. Desde el gobierno aseguran que no se trata de un debilitamiento del enfoque de género, sino de una integración de políticas transversales en un ministerio con mayor alcance social. Diversos sectores de la sociedad civil, colectivos feministas y referentes académicos han criticado la medida, señalando que representa un retroceso en materia de derechos de las mujeres y de la diversidad. Argumentan que la jerarquía ministerial ofrecía un marco de autonomía política, presupuesto propio y visibilidad institucional que ahora se verán limitados. “Convertir el ministerio en una secretaría es simbólicamente degradar la agenda de género”, expresó una representante de la Red Nacional de Mujeres. También han surgido inquietudes sobre la continuidad de programas especícos en áreas rurales, violenciadegéneroyempoderamientoeconómico. Por otro lado, voceros del gobierno sostienen que los programas no serán eliminados, sino reestructurados. “La protección de los derechos de las mujeres continúa siendo una prioridad. Esta reubicación nos permitiráarticularmejorconotrosprogramassociales”, declaró la ministra del Mides. La Secretaría de Equidad de Género, que funcionará dentro del Mides, tendrá como tarea principal la coordinación de políticas de igualdad, asesorar en la perspectiva de género a otras reparticiones del Estado y dar continuidad a los planes vigentes. Sin embargo, su rango institucional será menor al de un ministerio, lo que implica dependencia administrativa, menor peso político en el gabinete y posibles recortes presupuestarios. Expertos en políticas públicas advierten que, aunque las funciones puedan mantenerse formalmente, la capacidad de in†uencia y articulación interinstitucional podría verse afectada. También se subraya la necesidad de garantizar que el nuevo diseño preserve los espacios de participación ciudadana y los mecanismos de monitoreo. A pesar de las críticas, respaldamos la eliminación del Ministerio de la Mujer como un paso necesario hacia una estructura institucional más coherente con los principios de igualdad real. La existencia de un ministerio exclusivo para la mujer, si bien nació como una respuesta armativa a una deuda histórica, terminó siendo una forma institucionalizada de discriminación positiva que, a largo plazo, refuerza la idea de que las mujeres requieren un tratamiento aparte dentro del aparato estatal. La verdadera equidad se logra cuando las políticas públicas se diseñan para todos los ciudadanos sin necesidad de segmentarlos por género, reconociendo sus derechos desde una perspectiva humana integral. Integrar la política de género dentro del Mides, un ministerio con amplio alcance social, permitirá abordar las desigualdades desde una visión más transversal, sin perpetuar etiquetas que separan en lugar de unir. No se trata de ignorar las brechas, sino de superarlas con instituciones que promuevan la igualdad sin necesidad de estructuras diferenciadas. La equidad de género no debe depender del rango ministerial, sino de la voluntad política, la calidad técnica y la integración de enfoques en todas las políticas públicas. Matraqueos en todo su apogeo Segundo año de mandato tomaran la presidencia de la Asamblea y continuaran con “más de lo mismo”. Por ahora, debemos alegrarnos: se dio un duro golpe al Cartel de las Sanguijuelas y a su capo en el exilio. ¿Qué pasó con M&M? Aclaremos que no son los contes coloridos. Llama la atención que se ha descubierto mucho teatro entre estos dos personajes durante el supuesto mandato presidencial compartido. Da pena haber visto al Mero Micho “matraquear” —perdón, conversar— por los pasillos, tratando de conseguir los votos para que la abogada del delincuente extraditado tomara las riendas del cuerpo legislativo. Les salió el tiro por la culata, y ahora han quedado como gallinas a las que les retorcieron el pescuezo. El presidente quedó desenmascarado, en vivo y a todo color, al intentar imponernos una de las sanguijuelas como presidenta de la Asamblea, para así fortalecer los cimientos de la sinvergüenzura por un año más. Su mensaje tras la derrota fue un chiste que no le gustó a nadie: dijo a voz viva que enviaba “un mensaje claro en esta nueva forma de gobernar”. Seguramente tuvo que cambiar su discurso original, porque no esperaban ese revés. Conaban en que las presiones, dádivas y, claro, ese matraqueo que “nunca existió” —pero que todos vimos— les darían los frutos esperados de sus vagabunderías. El “arrastrómetro” lo llevó a su punto más bajo. Veremos con qué cara saldrá en la próxima conferencia de prensa de los jueves para hablarle a la nación. Es probable que venga con sus bravuconadas, porque la humildad no es precisamente uno de sus fuertes. Lasfuerzasdelmalrecibieron,porn, el merecido castigo que les dieron las fuerzas del bien. La alianza opositora —gran ganadora de este ejercicio democrático—, aunque frágil, se mantuvo rme y no cedió a los embates del Cartel de las Sanguijuelas ni del Ejecutivo. Esto parece marcar un buen inicio. Al momento de escribir estas líneas, se desconocen las concesiones internas que permitieron alcanzar los votos Jorge Obediente ¿Qué es la educación cívica y cómo mejora y fortalece la democracia? Instituciones El simple hecho de ser ciudadanos y ejercer los derechos políticos que nos corresponden nos impone la responsabilidad de contribuir a los cambios sociales, ya sean para bien o para mal. La educación cívica, en este contexto, no es más que el proceso mediante el cual nosotros, los ciudadanos, aprendemos sobre los derechos, deberes y responsabilidades que tenemos dentro de nuestra sociedad. Es por ello que, a través de la educación cívica, podemos comprender cómo funcionan las instituciones públicas, los principios que sostienen y regulan el Estado de derecho y, sobre todo, cómo participar activamente en la vida política de nuestra democracia. Un país se construye con el esfuerzo de todos sus ciudadanos. La realidad es que el desarrollo y el progreso socioeconómico de cualquier nación se sustentan en la fuerza colectiva de sus habitantes. No obstante, para que el desarrollo económico vaya de la mano con el buen desenvolvimiento de la sociedad, se requiere que los ciudadanos participen activapal fuente de información para muchos, nuestra mejor respuesta es reforzar los valores ciudadanos que fomentan una cultura de debate y consenso, de empoderamiento para todos los ciudadanos, creando así un país más equitativo. Sí, la educación cívica fue una pieza clave para reconstruir nuestra democracia tras la dictadura militar del siglo XX. Sin embargo,lasombradelacorrupciónha provocado la degeneración del sistema democrático en instituciones débiles, donde los jóvenes se sienten cada vez más desinteresados en los asuntos públicos. Es urgente retomar la enseñanza de los principios y valores básicos de nuestro orden democrático, devolviendo a los ciudadanos la conanza de que su participación sí tiene un impacto real en el bienestar nacional. La educación cívica representa el camino hacia la inclusión y la promoción de una democracia más representativa. La República no solo necesita instituciones públicas más fuertes y resilientes, ni empresas privadas más competitivas y un mercado más libre; el país clama al unísono por más justicia y mayor respeto a la ley. Panamá necesita con urgencia el fortalecimiento de una cultura democrática viva y resistente al desencanto político provocado por la corrupción y el debilitamiento institucional. Opinión LA AUTORA es abogada. EL AUTOR es internacionalista. EL AUTOR es ciudadano. Rosela Nasta mágicos, pero posiblemente lo sabremos al ver cómo se conguran las comisiones legislativas. Esta alianza multipartidista requerirá reparticiones equitativas. Un verdadero logro sería desbancar al presidente tradicional de la Comisión de Presupuesto:elmentadobenefactorde Bocas del Toro, que ha acumulado inmensas fortunas en detrimento del Estado, y cuyos negocios, curiosamente, no fueron saqueados durante los recientes actos vandálicos en esa provincia. Hay que reconocer que este nuevo cartel —alcualdeberemosbuscarleunnombre adecuado— está compuesto por un grupo heterogéneo: incluye tanto a buenos por convicción como a tigres rayados y otros no muy honorables, que digamos. Como dice el dicho, esta alianza “está pegada con moco”. El multipartidismo quedó re†ejado en la presidencia, vicepresidencia y segunda vicepresidencia de la Asamblea. La primera impresión del nuevo presidente de la Asamblea, electo por la aglutinación de las fuerzas del bien, ha sido positiva, pero deberá conrmarla con sus actuaciones, al igual que los demás miembros de la llamada alianza opositora. Una de sus primeras pruebas será lograr la modicación del reglamento interno de la Asamblea. Esa será la señal del rumbo que tomarán. También tendrán que revisar varias leyes sensibles al bolsillo, entre ellas la que prohíbe la minería, así como cualquier nuevo contrato de explotación minera, si llegamos a esa discusión próximamente. Nos toca a todos mantenernos vigilantes. Debemos exigir comportamientos que no lesionen nuestra soberanía, enmarcados dentro de la ética, la honorabilidad, la gallardía y la pasión por servir a la patria, y no para servirse de ella, como tristemente ha sido la experiencia del pasado. Acabamos de presenciar dos matraqueos en países distintos, con resultados diametralmente opuestos. El desquiciado aplicó todo lo imaginable para lograr que, primero los senadores y luego los congresistas, aprobaran su ley con reformas tributarias y recortes de gastos, que añadiría tres billones de dólares al décit actual y sacricaría a millones de personas, eliminando bene- cios y derechos adquiridos anteriormente. También se aumentó el tope del décit a la bicoca de 50 billones de dólares. Qué rico es ponerle turbo a la impresora de billetes sin respaldo alguno, bajo el lema de “En Dios Conamos”. Regresando a nuestro matraqueo local, vemos a la tribu del Mero Micho —compuesta por el contralor, ministros y otros secuaces—armaralunísonoquenohubo tal cosa, cuando la percepción pública es que descaradamente sí la hubo. Siguen utilizando el mismo guion que emplearon para “defender” el Memorándum de Entendimiento, repitiendo que no hay bases militares gringas dentro del área canalera, sino lugares de esparcimiento de larga estancia para las fuerzas armadas estadounidenses. Cada vez es más palpable la falta de credibilidad que sale de esas lenguas bídas, y cuando se pensaba que había funcionarios comprometidos con el adecentamiento gubernamental, tremenda desilusión nos hemos llevado. El resultado local fue una tremenda “pelonera” para los matraqueadores, porque se les volteó la tortilla y quedaron como grandes perdedores al no conseguir los votos necesarios para que sus allegados Luis Credidío

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