6B La Prensa Panamá, lunes 2 de junio de 2025 Casco Peatonal abre inscripciones para artistas y emprendedores con discapacidad. Escanea el código QR para más contenido en Ellas.pa. Las cuentas de un festival literario Al inicio, Centroamérica Cuenta era un sueño de un escritor como Sergio Ramírez que siempre ha creído en la libertad, la democracia, los libros y la lectura como motores de transformación social. Este festival literario nace en 2013 sin mayores ambiciones. Porque el ganador del Premio Cervantes 2017 no sabía hasta dónde podían llegar su proyecto de unir las letras de la región en un solo evento. “Comenzamos en Managua, Nicaragua, con unos 12 invitados, con muy pocos recursos. Nos apoyaron algunas instituciones privadas y las embajadas de España, Francia y Alemania, entre otras. Antes de las mesas íbamos a la tiendecita de la esquina a comprar las botellas de agua porque no teníamos un aparato administrativo, ni de logística, ni nada”, recuerda Ramírez en uno de los salones del Palacio Nacional de la Cultura, en ciudad Guatemala, donde Centroamérica Cuenta ocurrió del 19 al 24 de mayo. Ramírez, quien cumplirá 83 años este agosto, guarda un breve silencio y en una voz más baja añade: “luego vino la circunstancia que el gobierno de Nicaragua comenzó a utilizarnos, a impedir la entrada de la gente que deseaba asistir a nuestras actividades y amenazar a las embajadas que si nos apoyaban estaban incumpliendo sus deberes diplomáticos”. Comenta el novelista y cuentista que el punto más álgido fueron las acciones represivas en su Sergio Ramírez preside el festival Centroamérica Cuenta, el evento literario más importante de la región. Cortesía/Daniel Mordzinski país natal en 2018 contra la sociedad civil y tuvo que tomar la dolorosa decisión de suspender la edición de ese año de Centroamérica Cuenta a pocas semanas de su inauguración. “Y entonces ya era difícil en Nicaragua sostener el festival y ya lo fue completamente imposible cuando se dieron los hechos de la rebelión de 2018 de los estudiantes contra el régimen de Daniel Ortega. Cuando vino la pandemia, ya suspendimos el festival presencial y nos metimos de lleno a hacer el festival de manera digital. Y realmente fue un enorme éxito porque muy pocas entidades culturales estaban usando en ese momento el zoom para hacer sus eventos”, indica el ganador del Premio de Novela Alfaguara 1998. La ilusión crece Luego el festival se transformó en algo mucho más grande de lo que una vez imaginó Sergio Ramírez, ya que recibió el apoyo de gobiernos y entidades regionales. Fue así que regresó a la presencialidad teniendo como sede un por. Daniel Domínguez Z. ESPECIAL PARA ELLAS país distinto cada año: Costa Rica, Guatemala, República Dominicana y Panamá, así como una edición especial que ocurre cada septiembre en España. “Realmente el respaldo de los diversos países y la participación de autores, público e instituciones ha crecido bastante. Y ahora es una entidad sumamente compleja”, comenta cambiando el semblante. Con los años, Centroamérica Cuenta se parece a un juguete a base de piezas armables que le permite tener diferentes formas y tamaño. “Hemos ido agregando piezas a las mesas de discusión: primero de índole literaria, luego añadimos los talleres, el periodismo, la publicación de los libros de las Cuentas de Centroamérica y los reportajes que les pedimos a los autores cuando visitan los países. Nos hemos ido vinculando con el cine y queremos hacerlo con el teatro y la música. Por eso en Panamá en 2024 pusimos a conversar a Rubén Blades con Leonardo Padura (Cuba), y en Guatemala presentamos a los cantautores Haydée Milanés (Cuba) y Joan Manuel Serrat (España)”. Se siente complacido de que el festival haya colaborado a la difusión de nuestras letras centroamericanas. “Estamos colaborando a atraer a las editoriales. Me gustaría pensar que de alguna manera por gestión nuestra el número de escritores centroamericanos publicados ahora por editoriales internacionales se ha multiplicado. Muchos de los autores que antes no estaban en la cartelera internacional y ahora sí están”. Panamá como subsede Centroamérica estuvo por primera vez en Panamá en mayo de 2024. Recuerda la belleza del Casco Antiguo de la ciudad como telón de fondo. El público asistió a mares al Teatro Nacional y al Museo del Canal. “En Panamá aprendimos que en todas las ediciones debemos arrancar el festival de manera contundente y cerrarlo con igual fuerza”. Emocionado confirma que retornarán a Panamá en mayo de 2026. “¿Y qué nos impulsa a regresar a tu país, Daniel? Porque tenemos allá el reclamo de muchas entidades culturales, del propio Ministerio de Cultura que nos han invitado reiteradamente y de la gente que quiere al festival”, me comenta. Sergio Ramírez desea que nuestro istmo sea un escenario permanente de Centroamérica Cuenta. “Lo hemos discutido con nuestros patrocinadores y les gusta la idea de tener a Panamá como un ancla y que sigamos alternándola con otros escenarios en Centroamérica y el Caribe. Porque tener distintos públicos es muy importante para nosotros. Estamos contentísimos con los buenos resultados que hemos obtenido en todas las sedes”. Las palabras justicia poética llegan a la mente cuando el escritor manifiesta: “El festival es itinerante como consecuencia de que nos sacaron de Nicaragua. Pero hoy hemos encontrado que le hemos sacado ventaja a esa situación y ahora la ventaja es más importante que el defecto que nos sacó de mi país”. La historia de Centroamérica Cuenta, un festival que nació en Nicaragua en 2013 y que luego se transformó en un evento regional. Sergio Ramírez, su creador, echa la vista atrás, y de paso, comparte que regresarán a Panamá en 2026. Ramírez participó de forma entusiasta en diversas mesas redondas en el Centroamérica Cuenta ocurrido este año, en mayo, en Guatemala. Cortesía/Centroamérica Cuenta El cantautor panameño Rubén Blades y el escritor cubano Leonardo Padura en un conversatorio durante Centroamerica Cuenta 2024, realizado en Panamá. Anahil Trómpiz Torres
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