3A La Prensa Panamá, lunes 10 de marzo de 2025 Panorama El Canal de Panamá está en la mira de los intereses geopolíticos globales. Isaac Ortega Congresista impulsa ley para evitar que EU invada Panamá Getzalette Reyes [email protected] INICIATIVA La propuesta, que incluye a Canadá y Groelandia, es impulsada por el demócrata de Rhode Island, Seth Magaziner, y tiene el apoyo de varios colegas de su partido, que no tiene mayoría en el Congreso. El congresista demócrata Seth Magaziner presentó el pasado 6 de marzo un proyecto de ley que impediría al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, invadir Panamá, Canadá o Groenlandia sin la aprobación del Congreso. La iniciativa, denominada Ley de No Invasión de Aliados, surge en respuesta a recientes declaraciones del mandatario republicano Trump, quien ha amenazado con retomar el control del Canal de Panamá. De acuerdo con la oficina de Magaziner, el proyecto de ley prohíbe el uso de fondos para que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos participen en operaciones militares destinadas a invadir o apoderarse de territorios de estos países y regiones aliadas. “No se debe permitir que el presidente Trump ponga en peligro a los militares estadounidenses iniciando guerras innecesarias con nuestros aliados”, declaró Magaziner, según el sitio de noticias WPRI-TV. “Mi proyecto de ley deja en claro que el Congreso no permitirá que el presidente nos arrastre unilateralmente a conflictos innecesarios que no hacen nada para que los estadounidenses estén más seguros”, subrayó. La propuesta ha recibido el respaldo de varios legisladores demócratas, incluyendo a Shri Thanedar (Michigan), Brendan Boyle (Pensilvania), Dwight Evans (Pensilvania), Dina Titus (Nevada), Eric Swalwell (California), Pramila Jayapal (Washington) y LaMonica McIver (Nueva Jersey). El proyecto fue remitido al Comité de Asuntos Exteriores y al Comité de Servicios Armados para su evaluación. Aún está por verse si logrará avanzar en la Cámara de Representantes, actualmente controlada por los republicanos. Trump, durante un mensaje ofrecido ante el Congreso el pasado 4 de marzo, reiteró que su administración “reclamará el Canal de Panamá; ya lo empezamos a hacer”, a lo que el presidente panameño, José Raúl Mulino, respondió: “Nuevamente miente”. Hay que recordar también que Trump, quien asumió un nuevo mandato en la Casa Blanca el pasado 20 de enero, mantiene un conflicto arancelario con Canadá. Además, ha invitado al pueblo de Groenlandia a unirse a Estados Unidos. Canadá y Groenlandia, cambios políticos en puntos estratégicos SERVICIOS INTERNACIOANALES Tras la elección del nuevo líder del Partido Liberal de Canadá ayer domingo, el sucesor de Justin Trudeau deberá formar gobierno a partir de la próxima semana. El nuevo líder enfrentará una serie de retos, entre ellos, la guerra comercial desatada por Donald Trump, que ha intensificado las tensiones con Canadá. La elección la ganó Mark Carney, exbanquero y novato en política, quien se presentó ante sus copartidarios como el más preparado para hacer frente a la crisis económica y los ataques del presidente estadounidense. El nuevo líder también deberá abordar la creciente polarización interna y las dificultades económicas, incluidas la inflación y la crisis de vivienda que atraviesa el país. Además, tendrá que unir al Partido Liberal para las próximas elecciones federales, que deberán celebrarse a más tardar en octubre, aunque podrían adelantarse. Elecciones en Groenlandia Mientras tanto, las elecciones legislativas de Groenlandia, que se celebrarán mañana 11 de marzo de 2025, están marcadas por el debate sobre la independencia y la creciente atención internacional debido a las declaraciones de Donald Trump sobre la posible anexión de la isla. Aunque Groenlandia es autónoma desde 1979, sigue siendo dependiente de Dinamarca en defensa y política exterior. Los partidarios de la independencia buscan un mandato fuerte para separarse completamente, mientras que la influencia externa, como la de Trump y posibles desinformaciones rusas, también generan preocupación. A nivel local, los groenlandeses enfrentan decisiones sobre la explotación de recursos naturales, clave para su economía, con la minería como un tema crucial en estas elecciones. En los comicios, participan seis partidos políticos que luchan por 31 escaños en el Inatsisartut, el Parlamento de Groenlandia. Este órgano legislativo es responsable de las decisiones políticas locales, aunque las políticas exterior y de defensa siguen bajo control de Dinamarca. El primer ministro Múte Egede, del partido Inuit Ataqatigiit, busca un segundo mandato, con la independencia como su objetivo central.
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