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8A La Prensa Panamá, martes 4 de marzo de 2025 Contacto [email protected] Los artículos de opinión y las caricaturas son responsabilidad exclusiva de los autores. La opinión de La Prensa se expresa únicamente en el Hoy por Hoy. Desde su inauguración en 1914, el Canal de Panamá ha traído prosperidad y conectividad al planeta entero. Considerado entre las siete maravillas del mundo moderno, puente entre océanos y punto estratégico de transporte global, parece invulnerable. Esta proeza de ingeniería tiene un talón de Aquiles cada vez más expuesto: sin agua dulce, nuestro “ascensor de barquitos” no funciona. El cambio climático puede hacer que este mecanismo sea insostenible en un futuro cercano. En 2023, Panamá experimentó el segundo año más seco de su historia, con precipitaciones 30% por debajo de la media histórica. Si a esto sumamos que el ya agotado lago Gatún debe también proveer agua potable a 1.9 millones de personas, queda claro que los esfuerzos actuales del Canal por reutilizar agua dulce resultan insuficientes frente a la crisis climática global. ¿Dónde está la conexión entre estas dos variables? ¿Cómo podría la deficiente comprensión lectora afectar al Canal de Panamá? Aquí es donde nuestra mariposa comienza a batir sus alas. Ya puestos estos eventos sobre el papel, está lista la mariposa para batir sus alas, a punto de crear una disrupción inmensa si le permitimos seguir volando… Necesitamos encontrar soluciones innovadoras para que nuestro Canal pueda funcionar con menos dependencia del agua dulce. Para concebir estas ideas revolucionarias, quizás no necesitemos únicaLas colaboraciones para la sección de Opinión deben incluir la identificación del autor. Los artículos no deben exceder 650 palabras. No se publican colaboraciones que hayan aparecido en otros medios y La Prensa se reserva el derecho de seleccionar, editar y publicar. No devolvemos el material. ¡Éxito! Carnaval Dicen que en un evento de la capital había “26k de personas en el carnavalístico”, y elevan el hecho a la categoría de récord y éxito: cada uno disfraza lo que puede en estos cuatro días de jolgorio y farsa, que tradicionalmente se han usado para colarnos más de una ley, enmienda o directamente una dolorosa yuca que luego nadie es capaz de remover del magullado cuerpo de la patria. Pasaran los cuatro días de Carnaval y la vuelta a la realidad será dura: las escuelas no estarán preparadas, las clases se retrasarán, y como ya venimos advirtiendo, la educación volverá a ocupar el último lugar en el interés de este Ejecutivo, que sigue el camiNito del anterior, demostrando que su deterioro y decadencia ha sido mucho más rápido que el de todos los anteriores. El único éxito es el del fracaso, el de una política internacional poco transparente, el del miedo a Trump, el del deterioro de la confianza del ciudadano en las instituciones, el del victimismo político, el del rudo con los del patio y poco firme con los que nos amenazan de fuera, el del huelepeísmo en viajes al exterior y el de asesores cepillones que avalan los rofeos del presidente. Preocupa esta idea de éxito fracasado, la distorsión de lo que es un acierto político, y cómo nos vamos comiendo el cuento del alcalde disfrazado de policía o el del presidente en una foto con Felipe VI, haciéndola pasar por fortalecimiento de relaciones cuando la política exterior la marca en España el presidente del Gobierno: la imagen siempre, el taquilleo, y el escamoteo de las mil palabras. Éxito no son miles de personas desperdiciando agua, sino niños en colegios bien acondicionados, municipios limpios y sus empleados bien remunerados: hacerse el encontradizo en fotos con presidentes o disfrazarse de policía son síntomas de decadencia política y de un ridículo sonrojante que no vamos a consentir por mucho que nos rofeen. Carnaval en La Central Fiestas más grande de Europa. Regresando a nuestra región, el carnaval de La Habana, si bien se celebra en otras fechas, es alegre, igualmente colorido y contagioso de mucho sabor. Otro que nace como hijo de este es el famoso carnaval de la Calle 8, en la ‘sawesera’ de Miami, donde los nuevos y no tan nuevos cubanos rememoran esa tradición heredada de sus antepasados. Ahora, después de este descriptivo viaje de carnavales alrededor del mundo, nos toca regresar al suelo patrio. El carnaval de Panamá inicia en la época de la colonia, con “representaciones” de supuestas batallas entre conquistadores, esclavos e indios que se extendían desde lo que hoy se conoce como la Avenida Balboa, hasta el famoso parque de Santa Ana. En realidad, el carnaval tradicional de Panamá nace luego de que, el entonces alcalde la capital en 1910, José A. Arango, los oficializa y se invita a la Reina del Club Unión, considerada una mujer bellísima, Manuelita Vallarino, a que fuera la 1ª reina del Carnaval. Desde ese entonces, mucha agua ha pasado debajo del puente y el Carnaval ha ido mutando a las fiestas populares en las que se han convertido. Hay muchos que recordamos aquellos famosos desfiles de carnaval por la central, donde las diferentes reinas de las etnias establecidas en Panamá, los Shriners, las cervecerías, los grandes almacenes y así muchos negocios, se lucían con el garbo que era esperado por todos. ¿Cuántos añoramos al inolvidable Lucho Azcárraga, montado, junto a su conjunto, en un carro alegórico interpretando las más alegres tonadas típicas del país? Juan B. McKay A. [email protected] Pequeñas manos, grandes huracanes Innovación Han de decir por ahí, que el pequeño aleteo de una mariposa en Japón desencadena un huracán en Chile. Es el llamado efecto mariposa. Que esto haya sido comprobado científicamente o no, no es relevante para nuestra reflexión. Lo que sí podemos asegurar, en cualquier escala y para cualquier situación, es que el mundo crea conexiones inesperadas. Depende de nosotros encontrarlas y sacarles provecho. Pensemos en una serie de eventos aparentemente desconectados, como una mariposa esperando revolotear. Variable número uno: la preocupante falta de comprensión lectora en la juventud panameña. Las pruebas nacionales censales “Crecer 2018” determinaron que cinco de cada diez niños en tercer grado no alcanzaban el nivel mínimo en lectura, con un aumento a casi nueve de cada diez en las comarcas. En la versión 2022 de la prueba PISA, Panamá ocupó el puesto 74 entre 81 países, obteniendo nuestros estudiantes en lectura 392 puntos, muy por debajo de la media de 450. El panorama no mejora según investigaciones más recientes. El estudio ‘Foco: actores que influyen en el aprendizaje lector’, llevado a cabo por el Centro de Investigación Educativa (CIEDU) a inicios de 2024 demostró que, en Panamá, uno de cada cinco niños en segundo grado carece del dominio básico de comprensión lectora. Ahora, introduzcamos una segunda variable que, a primera vista, no debería verse afectada por la primera. mente gran infraestructura, “genios” matemáticos y físicos que calculen complejas ecuaciones. Quizás ni siquiera necesitemos planes maestros costosos o enormes inversiones. Lo que verdaderamente necesitamos es el imperceptible primer aleteo: una niña que redescubra el encanto y la magia de una historia imposible. Dos niños que vuelvan a soñar despiertos pasando páginas en vez de videos. Un salón de clases que pida una historia más. (Denota el crecimiento exponencial). Nosotros, hoy, con el poder de influir en los más pequeños, dejando nuestra mente correr libre entre libros y narrativas, heredándoles esa curiosidad sin límites y creatividad transformadora. Los pequeños que encuentren interés en leer hoy un libro y comprendan lo que leyeron; los jóvenes que lean con pasión un poema sobre el agua cristalina o sobre su nación, que descubran a Carlos Francisco Changmarín o a Amelia Denis de Icaza, serán los futuros presidentes, ingenieras, arquitectos y soñadores que transformarán problemas aparentemente insolubles en oportunidades de innovación. La crisis del agua en el Canal no se resolverá únicamente con soluciones técnicas, sino con mentes creativas capaces de reimaginar completamente el reto. Y esas mentes se cultivan desde la infancia, a través de la lectura y el pensamiento crítico. Ese pequeño libro en esas pequeñas manos hoy no es solo una semilla de conocimiento—es el huracán del cambio que barrerá los obstáculos del mañana. Es la fuerza que permitirá a Panamá enfrentar sus desafíos más grandes con ideas revolucionarias nacidas de mentes educadas y creativas. Opinión EL AUTOR es escritor. EL AUTOR es egresada del Laboratorio Latinoamericano de Acción Ciudadana 2021. EL AUTOR es analista y dirigente cívico Pedro Crenes [email protected] Eran carnavales donde no todo era carros alegóricos, sino donde, durante muchos meses, se preparaban comparsas tan diversas como nuestro pueblo, y donde se derrochaba ritmo y alegría característica. Años después, las más grandes y famosas orquestas del Caribe se disputaban el derecho de tocar en los toldos o en ‘cualquier esquina’, como dice la canción. Eran fiestas carnestolendas, donde imperaba el respeto y la buena música. La semana pasada escuché a Pedrito Altamiranda Jr. evocar lo que le inspiraba, a quien ha sido uno de los más grandes exponentes del sentir del carnaval en la Ave. 7ª Central. Contaba cómo su papá, mi buen amigo el del bombín, se sentaba en chivas o autobuses en búsqueda de inspiración y, de la mano del Gran Tille, nos regalaron de la mejor música que podemos recordar sobre nuestro carnaval capitalino. Siento y creo que el carnaval de nuestra ciudad capital no debe intentar competir con las fiestas del interior del país. En varias ciudades y pueblos hay Calle Arriba, Calle Abajo y hasta Calle del Medio. Hay reinas o princesas por días y por todo un año, y así, desde las entrañas de nuestras costumbres y tradiciones, el lujo y el esplendor de esos carnavales no deben compararse con lo que debería ser el de la capital. Aplaudo la decisión de la ATP de no patrocinar el Carnaval este año, lo que permitió que la empresa privada, junto a la alcaldía, retomase esta iniciativa de hace algunos años. Esta es ‘la fiesta del pueblo’, y como tal, debemos demostrar que tenemos buena música, buenas bebidas, la mejor alegría y la mejor gente del mundo para darle la bienvenida a nuestros visitantes y amigos y celebrar de la mejor forma lo que Pedrito nos cantó. Hoy concluye el Carnaval, la fiesta que antecede al inicio de la Cuaresma católica. Varios países del mundo ofrecen un espectáculo lleno de alegría, color y bullicio, los cuales, dependiendo del país, se combinan con peculiaridades de cada uno de estos países o regiones donde se celebran. Quizás los más grandes y conocidos de los que se celebran en nuestro continente, son los Río de Janeiro en Brasil y cuyo rival directo es el Carnaval de Salvador, Bahía, también en Brasil. Muy reconocido también, aunque de un talante totalmente diferente, es el famoso Mardi Gras en New Orleans, Estados Unidos de América. Más parecido al de Brasil, el carnaval de Barranquilla ha sido hasta declarado “Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad”, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). Millones de personas se toman las calles de esta bella ciudad caribeña en Colombia, en una fiesta que a veces pareciera interminable. Otra cosa es el carnaval de Veracruz, el más grande y alegre de México, que se caracteriza por desfiles y mucha música que alegran hasta al más triste. En Europa, el Carnaval se celebra de una manera más ‘europea’, pero no por ello con menos alegría ni menos vistosidad. Destacan el de Colonia en Alemania, el de Cádiz en España, el mundialmente famoso carnaval de Venecia en Italia y el también célebre de Tenerife en España. Hay uno un tanto diferente, el de Notting Hill en el Reino Unido, que algunos han calificado como el La crisis del agua en el Canal no se resolverá únicamente con soluciones técnicas, sino con mentes creativas de reimaginar completamente el reto. Y esas mentes se cultivan desde la infancia. María Alejandra León Suárez [email protected] Fundado en 1980 Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa Presidente Ejecutiva y Directora Editorial Annette Planells Gerente Comercial Sudy S. de Chassin Subdirectora y Editora de la Unidad de Investigación Mónica Palm Editora Digital Yolanda Sandoval Editor del Impreso Juan Luis Batista ISSN 2953-3252: La Prensa ISSN L 1605-069X: prensa.com Aviso sobre el uso de Inteligencia Artificial Este periódico emplea inteligencia artificial (IA) para asistir en la edición de contenidos y mejorar la experiencia de lectura. Garantizamos que todo contenido publicado es creado y rigurosamente revisado por nuestro equipo editorial antes de su difusión. Utilizamos la IA como herramienta de apoyo para asegurar la precisión y calidad de la información que entregamos a nuestros lectores. Esta es una publicación de Corporación La Prensa, S.A. ©. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción, sin la autorización escrita de su titular. Presidente fundador Roberto Eisenmann Jr. Director emérito Guillermo Sánchez Borbón Aplaudo la decisión de la ATP de no patrocinar el Carnaval este año, lo que permitió a la empresa privada, junto a la Alcaldía retomarse esta iniciativa de hace algunos años.

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