4A La Prensa Panamá, domingo 2 de marzo de 2025 Panorama Su apellido pesa y su corona confirma su linaje. Dice que el que pone la plata pone la reina, que no hay espacio para ‘pocotonas’ y que el Carnaval perdió su esencia. ¿Volvería a ser reina? Sin dudarlo. Pero con ocho días de culecos en vez de cuatro. ¿Qué distingue al Carnaval de Panamá de otros? Agua, guaro y campana. Las tunas con sus tonadas y el lujo y la elaboración de las carrozas nivel Disney. También las dinastías de reinas. Si el Carnaval tableño es de exportación, ¿por qué no somos Río ni Barranquilla? Porque no lo hemos exportado. Cuando un turista va a Las Tablas sale encantado. ¿Cómo le explica a un turista cómo celebra el panameño el Carnaval? Es la fiesta de la liberación panameña, donde hay tumulto y mucha gente siendo ella misma. Por cuatro días todo se detiene y la gente se entrega al festejo. Si alguien nace en Las Tablas, ¿cómo elige su calle? De un lado del parque, el de la iglesia, es Calle Arriba; del otro, Calle Abajo. Naces identificado. Si no vives ahí, entras a las tunas por los apellidos. ¿Por qué existen dos calles en disputa? No sé, pero es la esencia del Carnaval. ¿La rivalidad dura todo el año o solo cuatro días? Solo cuatro días. Después todo vuelve a ser normal. Tito Afú es Calle Abajo. ¿Cuánto se ha metido la política en los carnavales tableños? Nada. El Carnaval lo organizan las directivas de cada calle con apoyo privado. De hecho, deberían aportar más. El año pasado mi sobrina no recibió ni un centavo del gobierno. ¿Cuándo supo usted que sería reina de Carnaval? Vengo de una dinastía con 26 reinas en la familia. Mi mamá y mi familia paterna estaban en la directiva de Calle Abajo y debían ofrecer a una de sus hijas. Nací con eso. En el reinado que hubiera yo era la reina. Hasta 1996 que fui reina del Carnaval. ¿Eso es por rosca, votación, suerte o mérito? Antes había requisitos… Las reinas dinásticas tienen prioridad. Mi hija también. Esto lo llevamos en la sangre, no solo los gays—aunque sin ellos no habría Carnaval— sino todos, hombres y mujeres. Hasta los noviazgos influían: tú no querías que tu hijo se casara con alguien de la otra calle… Mi mamá cambió de tuna porque se casó con mi papá. Mi hermano soñaba con que su hija fuera reina y la nombró con el nombre dinástico: Lía Victoria. Igual que conmigo: mi hermana le pidió a mi mamá nombrarme así para ser reina, como era mi tía Lía Victoria en ese momento. ¿El que pone la plata pone la reina? Antes no, pero hoy sí. Sin dinero, no puedes. ¿Es cierto que ya saben quiénes serán reinas hasta 2099? Sí, hay filas. Las niñas nacen y crecen participando hasta ser damas principales. ¿Y cómo ser reina si no eres de la monarquía? Depende de la rosca de la directiva. Borrero, Broce, Tejada, Vergara… ¿Qué familia ha tenido más reinas? En Calle Arriba, las Vergara. En Calle Abajo, las Vásquez, que somos nosotras. ¿Metería a su hija en ese julepe? El Carnaval ha cambiado. Ya no hay valores, la exposición en redes es peligrosa y el trato entre las tunas es muy violento. ¿Ya la tiene apuntada? No haría falta. La meterían de una vez. ¿Qué diferencia a las primeras reinas de las de ahora? Antes eran elegidas. Hoy cualquiera puede ser reina, incluso las feas. ¿Usted se considera hermosa? Elegante, bien puesta. ¿Qué otra diferencia hay? Los vestidos antes eran sencillos, hechos por modistas en casa. Ahora son de diseñadores y costosísimos. Antes había acceso, ahora hay exceso. Antes cada reina bailaba como le nacía. Ahora todas siguen un patrón, es una copia. ¿Cuándo se perdió la esencia? Hace 15 años. Mira cómo bailábamos y cómo bailan. Antes cuidábamos la elegancia. Ahora lo importante es el show. ¿Cuál es su reina de referencia en ambos bandos? Knockout Flor Mizrachi Angel [email protected] Cortesía Lía Victoria Borrero II ‘Vuelvo a nacer y vuelvo a ser reina’ “No soy de las que se jura reina toda la vida. Yo estudié finanzas y soy directora comercial en Assa. Solo que por cuatro días la vivo”. Grace Beatriz Hoskins y Dinora Acevedo. Un dato curioso desconocido del Carnaval. Antes, en la iglesia, los de Calle Abajo se sentaban a la izquierda y los de Calle Arriba a la derecha, con filas identificadas. No se daban ni la paz entre ellos. ¿Qué diría la primera reina al ver cómo ha cambiado el Carnaval? Siempre vamos a amar la tuna, eso se lleva en la sangre. Por Punta Fogón la vida mía. Pero sí da dolor ver cómo va cambiando para peor. ¿Quién en la tuna hace las mejores mofas? Cada calle dirá que las suyas son las mejores, pero siempre hay tonadas prende parque, que son las que realmente pegan. ¿Qué tiene Calle Abajo que quiere Calle Arriba? Una reina como yo. ¿Qué tiene Calle Arriba que quiere Calle Abajo? Nada. No queremos nada de ellos. ¿Qué conlleva hacer una tonada? Púchica, hay que nacer con ese talento. Son artistas y conocen todos los bochinches del pueblo… y también inventan cosas. ¿Ambas tunas inventan por igual? Sí. ¿Quién escribe las tonadas? Eso es secreto de Estado en ambas tunas. Y se pasa de generación en generación. ¿Hay autocensura? Hoy no. Antes sí. Los alcaldes vigilaban que no hubiera nombres propios ni insultos ni vulgaridad. Ahora se canta lo que sea. Nos pasamos con el bullying: la jocosidad se volvió ofensa. ¿Cuál fue la tonada que más le cantaron cuando fue reina? Me decían La Moracha, que es una lagartija. Su tonada favorita de Calle Abajo y de Calle Arriba. La de mi sobrina el año pasado, una obra de arte. Y de Calle Arriba, el Plaque Plaque, buenísima. ¿Después de reina ya no canta contra la reina contraria? Ahora me limito muchísimo. Ya pasé por ahí. ¿Por qué dicen que “el Hampao está maquillado”? Porque tiene la cara redonda y se maquilla porque sale en las noticias. ¿Por qué a los de Calle Arriba les dicen “cucarachas”? Porque son cucarachas. ¿Cuánto cuesta ser reina en Las Tablas? El reinado de mi sobrina costó $600,000. El mío, $300,000. Antes, los fondos salían de empresa privada, actividades y el aporte familiar. Ahora hay que pagarle a la tuna para ser reina, y la directiva organiza el Carnaval. ¿Cuánto cuesta solo ser elegida reina? Entre $30 y $50 mil solo para firmar el contrato. Luego, la reina debe pagar sus vestidos del año ($25 mil), tres polleras ($12 a $14 mil cada una), el traje de coronación, corona y cetro ($25 mil más). En total, hay que invertir como $120 mil. ¿Y los culecos? Cada cisterna cuesta $10 mil. Y cada tuna usa unas seis. Además, la reina contrata un estilista por todo el año. Yo me dediqué un año al gimnasio y a la oratoria. ¿Es cierto que para ser bella hay que ver estrellas? Sí. Los disfraces son pesados, los alambres puyan, los tocados pesan y los aparejos son de hierro. Terminan con cortes y moretones. ¿Las obligan a adelgazar si no cumplen con el estándar? Sí, es parte del reglamento. Hay que lucir bella. ¿No hay gordas lindas? Sí, pero si pones una, le cantan por días. No hay reina “pocotona” en Las Tablas. ¿No han pensado en algo más simbólico, como auspiciar una causa social o remozar el pueblo? No. Esto es tradición y por ella se trabaja. Eso le toca a las autoridades. Las Tablas sigue igual que hace años. El agua es un problema y la luz se va a cada rato. ¿Quién fiscaliza los fondos del Carnaval? Es un secreto de Estado dentro de las directivas de cada tuna. ¿Cada cuánto se renuevan las directivas? Cada año, pero siempre está la misma gente. ¿Cosas que solo entiende quien ha carnavaleado? Orinarse encima, tomar cuatro días y sus noches, y olvidarse de lo fancy. Es sobrevivencia, pero divertida. Carnavalero que se respete… Va a Las Tablas. ¿Si no fuera tableña, dónde le gustaría carnavalear? Pedasí. ¿Lo mejor de un Carnaval? Los culecos. Lo más sabroso. Lechona y pastelito. Es toda una economía. ¿Está de acuerdo con los fuegos artificiales en medio del parque? Sí, es tradición. Si no les gusta, pueden irse. No es obligatorio estar. ¿Y que Calle Arriba los queme frente a un museo patrimonio? Nosotros los quemamos casi en la iglesia. Se toman precauciones. No pasa nada. ¿Qué opina de las gradas en el Parque 8 de Noviembre que bloquean la vista? No me parece. Ya estamos muy apretados y le quitan espacio al público. ¿Qué sugerencia daría a los organizadores del Carnaval de la ciudad de Panamá? Que den la plata a los carnavales de los pueblos. Y que lo pague la empresa privada, no el gobierno. Todo el mundo se faja del puente para allá, ¿por qué acá no? ¿Para qué sirve ser reina en la vida? El reinado te da madurez, exposición y experiencia. ¿Qué queda después? ¿Le cambió la vida? Sí. Por eso entré a Miss Panamá, Miss Universo y Miss International. Pero no me creo reina de por vida. Estudié Finanzas y soy directora comercial en Assa. Solo que por cuatro días, la vivo. Y vuelvo a nacer y vuelvo a ser reina. Pero con ocho días de culecos en vez de cuatro días de fiesta.
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