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5B LaPrensa Panamá, 29 de septiembre de 2024 Vivir Tu opinión nos interesa [email protected] Viajar a Chimán, desde Panamá o Darién, era largo y azaroso. Navegar en balandras a vela era lento y peligroso por los erráticos vientos y las tormentas deollgfo de Panamá. La serranía de Majé. Alexander Arosemena Cruz de Vasco Núñez de Balboa: según los chimaneros, esta cruz marca el sitio original por donde Vasco Núñez de Balboa bajó al océano Pacífico y tomó posesión de él en nombre del rey de España, en 1513. (Foto: A. Wetmore. Chimán, 3 de abril de1950). Archivos del Instituto Smithsonian. Los manglares de Chimán: los hermosos manglares en la boca del río Majé habitados por inmensas bandadas de loros. (Foto: A. Wetmore. 2 de marzo de 1950). Archivos del Instituto Smithsonian. La serranía de Majé y la cruz de Vasco Núñez en Chimán VIAJE Stanley Heckadon Moreno ESPECIAL PARA LA PRENSA [email protected] El 29de septiembrede 1513, Vasco Núñez de Balboa,tras cruzarel istmo, toma posesiónde la Mardel Suren nombredel rey de España. Según la gente de Chimán,pueblo delGolfo de Panamá,fue aquídonde ocurrióeste dramáticoepi - sodio. A90kilómetros alestede Ciudad de Panamá se inicia la serranía de Majé, que corre paralela ala costa por100 ki - lómetros hastaDarién. Sus cimas sirven dedivisoria de aguasentre losríos queflu - yen alnorte haciael Bayanoy los quecorren alsur, alPací - fico. A mediadosdel siglo XX,estas selvaserancientífi - camente desconocidas. Era difícilobtener información sobreellas. Losme - jores mapas, los del ejército norteamericano, eran casi inservibles. En 1950, el velo científicocomenzó adespe - jarse cuando la exploró Ale - xander Wetmore,ornitólogo,a quiensus amigospana - meños llamaban Aleajndro o don Alejandro. La vertientesur dela serra - nía pertenece al distrito de Chimán,y ladelnorte, aChe - po.Entre laserranía deMajé y lacordillera deSan Blas, fluye el Bayano, por siglos te - rritoriode loskunas ylímite efectivo del control del go - bierno central, ya fuese el de Bogotáen elsigloXIX,o elde Panamá en elXX. Violentas fueron lasguerras delcaucho en Darién y Bayano. Eldistrito deChimántiene 1,977km2y supoblación,se - gún el censonacional de 1950, era de 1,018 habitantes, uno por kilómetro cuadrado. Su gente seconcentraba en caseríos costeros como Chi - mán, Brujasy GonzaloVás - quez. Chimán era el poblado mayor ycentro económicoy político del distrito. Viajar a Chimán,desde Pa - namáo Darién,era largoy azaroso. Navegar en balandras a vela era lento y peligro - soporlos erráticosvientosy las tormentasdel Golfode Panamá. Esporádicamente, balandraso gasolinerasiban yvenían conproductos dela tierra y pasajeroshacia la ca - pital, trayendomercancías para satisfacer las pocas necesidades de los chimaneros: ropa, telas, machetes, hachas, fósforos, querosén y medicamentos de patente. Como los darienitas, los chimaneros eran gente negra o mulata. Según el censo nacional de1940, elúltimo en usar el términode raza, sus habitantes estaban distribui - dos así: blancos, 13; negros, 489; mestizos, 446, incluyendo alos mulatos.Había “otras razas”:46 individuos, divididos entre 44 indíegnas y 2 de “razaamarilla”, es decir, loschinos.En 1970,conocía Sandalio Ortiz, cacique de los waunán de Chimán. El7 defebrerode 1950,un DC3de laFuerza Aéreadejó en la base deAlbrook a Wet - morey suasistenteWatson Perrygo. Tras revisar la esta - ción biológica en la isla de BarroColorado, viajaronenun jeep a Ocú,donde los paleon - tólogosC.L. GazinyTheodo - reWhite,a pedidodelDr. Alejandro Méndez Pereira, excavabanlos huesosfosili - zados de extrañasy gigantes - cas criaturas, entre ellas, unosperezosos gigantes.Es - ta noticia se propagó como fuegoveranero enunpotrero seco. Con datos valiososque les aportó el coronel Frank Pet - tit, jefe delServicio Geodési - co,Wetmore descartódosde las tres rutasposibles para exploraresta serraníaque habíaobservado ensusvue - los a Jaqué. Desechó la del norte, subiendo, con permiso de los kunas,el Bayano hasta sus cabeceras, parasubir la serraníay doblarlaalsur ysa - lir alPacífico porChimán. También abandonó la idea de viajar enbalandra desdeLa Palma en Darién.Pettit le aportó datossobre laubica - ción delos picosy susríos, los nombres de hombres conifa - bles, y lossenderos selváticos usados para extraer el caucho y la cacería. Wetmore llevóconsigo a Ratibor Hartmann, joven asistentedel Gorgas,quien trabajaba enlos estudiosde lafiebre amarilla.Partieron haciaChimán el13 defebre - ro,víspera decarnavales,en una lancha rápidade la Fuer - za Aérea. Cálidaacogida lesdiola gente. DoñaMaría Romero de Jiménez les alquiló la mejor casa delpueblo. Cómoda, fresca,construida sobrepilo - tes, con balcones y vitsa al Golfo de Panamá. Cercana al puerto, la viejaiglesia colo - nialy alacruz,la gentelede - cía a Wetmore que por allí ha - bía bajado VascoNúñez a la playa para reclamarla Mar del Sur para su rey, Carlos I. Como baquianos, Wetmo - re contrató a Francisco Ayala, JoséManuel Ortegay aRo - sendo.A canaleteypalanca subieronel Chimáncruzan - dosus vastosmanglares,con milesde lorosque alamane - cer volaban haciala serranía, regresando al atardecer. Tras alcanzar el río Corotú, siguierona pierumbo nortehasta quebrada Cauchero, donde montaron el campamento. A don Alejandrole pareció que las aves de esta serranía no tenían fin. Obtuvo más de 1,000 especímenes. Regresaríaen1951 paravolvera explorarla. Pero, súbitamente, la Policía Nacional dioungolpe yderrocóalpre - sidente Arnulfo Arias Ma - drid. Dramático evento que me tocó presenciar desde la Casade laMarina, siendoun niño recién llegado de Chiri - quí para asistir a primaria en el Colegio Javier. ANDREW GARFIELD ‘Solo se llega a la luz a través de la oscuridad’ El actor estadounidense Andrew Garfield, conocido por la saga de 'Spiderman', clausuró el festival de San Sebastián con 'We live in time', una historia de amor y muerte que le hizo reflexionar mucho sobre el sentido de la vida. "He aprendido una lección que no dejo de recordarme una y otra vez y que no he llegado a absorber por completo", dijo en rueda de prensa, "solo hay una manera de llegar a la luz y es a través de la oscuridad". Siglas y acrónimos La voz de la Academia Martín Jamieson [email protected] Dámaso Alonso tituló un poemilla La invasión de las siglas, por este rasgo del siglo XX, “siglo de siglas”, expresión debida al escritor Pedro Salinas. Alon - so encontraba “ suaves ”las si - glas de la tradición (INRI, SPQR, RIP); pero se oponía a las más recientes (“USA , URSS,OAS,UNES - CO:/ONU,ONU,ONU/TWA, BEA, K.L.M., BOAC/¡REN - FE, RENFE, RENFE!” ). Durante los siglos XX y XXI hemos venido sufriendo las arremetidas del “gris ejército es - quelético” siglar. Sigla quiere decir abreviación de las letras iniciales de una ex - presión, por ejemplo, FBI, en inglés Federal Bureau of Inves - tigations, o sea Agencia Fede - ral de Investigaciones, de an - glicismo nada casual. Los acró - nimos son siglas que se leen por sílabas(ONU=0rganización de las Naciones Unidas; sigla y, a la vez, acrónimo). A pesar del esclarecedor aporte de Félix Rodríguez González, Taxono - mía de las abreviaciones y de la siglación: revisión crítica y propuestas terminológicas (en la Revista Española de Lin - güística, 2019), el debate conti - núa sobre el vocabulario no unívoco de siglas, acrónimos y formas parecidas. Siglas y acrónimos o telescopamientos (telescopar es omitir una o más sílabas en una palabra) sirven para ma - nipular el pensamiento. En la novela 1984, de terrible actualidad, cuyo lema “El Gran Hermano te vigila”e xplica programas televisivos deriva - dos de su nombre, el inglés George Orwell acuñó acróni - mos como Minspeak (Minis - terio del habla), Minitrue (“Ministry of Truth”, Ministe - rio de la Verdad), Miniplenty (“Ministry of Plenty ”, Ministerio de la abundancia). La manipulación y empobrecimiento del lenguaje que horrorizó a Orwell, parcialmen - te reflejado por el uso de si - glas y acrónimos, impulsó a que Demetrio Fábrega publi - cara La degradación del es - pañol y el ocaso del hombre racional . Orwell advertía que se subvertía el pensa - miento a través de la expre - sión. Fábrega peregrinó por este camino. Hace años entre nosotros a casi nadie daba impresión DACA, Departamento de Acueductos, Calles y Alcan - tarillados, IDAAN, Instituto de Acueductos y Alcantarilla - dos Nacionales, o IFARHU, Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Reucr - sos Humanos, de nombres completos que pocos recuer - dan. Después penetraron en - tre aquellas siglas quizá de “suave forma”, según formuló Dámaso Alonso, acrónimos tales como (la impronunciable)CSS,Meduca,Mides, Mincul, Minsa, Minseg o Mi - viot, semejantes a los de la distopía que espantaba a Orwell. Se empezó con DACA para terminar en Miviot. (Un desdeñoso Alonso djio del crítico Astrana Marín que co - menzaba en astro para termi - nar en rana). Parainformarsemásacerca de siglas y acrónimos pueden consultarse, entre varios pu - blicados en España, el Diccionario internacional de siglas y acrónimos, de José Martínez de Sousa, el Diccio - nario de siglas y abreviaturas, de M. Alvar y A. Miró, o el Diccionario de abreviaturas, siglas y acrónimos, de M. Murcia Grau. Rodríguez González divulgó un pormenorizado escrutinio del primero, según Apuntes le xicográficos: Reflexiones a pro - pósitodeundiccionarioeg - neral de siglas(en la Revista Española de Lingüítsica Aplicada, 1986). Son igualmente estimables de FRG “Morfología del número en las siglas”(en Lingüística Es - pañola Actual, 1984), “El gé - EL AUTOR es investigador lingüístico y literario e instructor de idiomas. nero de las siglas”(en Revis - ta Española de Lingüítsica, 1984), “La traducción de las siglas inglesas”(en Estudios de filología inglesa, 1990) o también “Las siglas como procedimiento lexicogené - sico”(en Estudios de lin - güística. Universidad de Ali - cante, 1993). AunqueporHispanoaméri - ca han aparecido variados diccionarios, uno abarctaivo de siglas y acrónimos falta paraPanamá.Convieneno porFOMO(delinglés “Fe a r Of Missing Out”, es decir, el miedo a estar ausente, a per - derse algo que está en el can - delero) sino para prevenir - nos de ciertos usos. (En homenaje mínimo a la meritoria labor iflológica de Félix Rodríguez Gonzá - lez, catedrático de lengua inglesa).

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