8A LaPrensa Panamá, lunes 18 de marzo de 2024 Opinión Los artículos de opinión y las caricaturas son responsabilidad exclusiva de los autores. La opinión deLa Prensase expresa únicamente en el Hoy por Hoy. [email protected] Las colaboraciones para la sección de Opinión deben incluir la identificación del autor. Los artículos no deben exceder 500 palabras. No se publican colaboraciones que hayan aparecido en otros medios y La Prensase reserva el derecho de seleccionar, editar y publicar. No devolvemos el material. Fundado en 1980 Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa Presidente fundador Roberto Eisenmann Jr. Director emérito Guillermo Sánchez Borbón † Presidente Ejecutiva Annette Planells Directora Editorial Rita Vásquez Gerente Comercial Sudy S. de Chassin Esta es una publicación de Corporación La Prensa, S.A. ©. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción, sin la autorización escrita de su titular. ISSN 2953-3252: La Prensa ISSN L 1605-069X: prensa.com Un quinquenio inolvidable (1) Economía Roberto Brenes [email protected] En el último lustro el país ha sufrido un deterioroeconómico,ifnanciero,so - cial y moral sin precedente. El recuento que sigue, no etsá inspirado políticamente. Trata más bien de apuntar a los fracasos estructurales del PRD y que po - nen a la nueva administración y al país en ge - neral, en una coyuntuar difícil, volátil, y don - de tomará más de un lutsro revertir el curso de estos imperdonables. La rápida implosión de quien promteía ca - pacidad y ejecución fue una decepción gi - gantesca. En vez de un gobierno de tecnócra - tas, con fuerza en el Ejeuctivo, terminamos con gobierno débil, dominado por un patri - do concentrado en desvalijar el erario y en reelegirse para seguir la fiesta. La gasolina de estos excesos fue un galo - pante gasto público en planilla a cotsa de in - versión pública. A simple vitsa se ve el aban - dono de la infraestructura vial e inmobiliaria en todo el país, que contarsta con una costosa e incompetente burocracia arribista y politi - zada. Y el fósforo de esa gasolina ha sido la disrupción de la institucionalidad. El MEF y la Contraloría, en concierto con la Asamblea se han cargado los balances y contarpesos pre - supuestarios para favorecer al partido de go - bierno. Y, la cereza del pastel, es la modifica - ción de la ley de la Contraloría Ley 351 de di - ciembre del 2022, que deaj al Contralor, amo yseñor,delatransparenciaylaifscalización pública. Desgraciadamente, en 5 años no solo se abusó del poder. Aquí se tomaron o deajron de tomar decisiones que afetcan profunda - mente la capacidad del país y minan su futuro. Nunca, creo, se han tomado tan malas de - cisiones. Y nunca antes se ignoarron tantas oportunidades valiosas como ahora. “Robar - le al país”, decía el General San Martín “es de - lito. Pero arruinarlo es traición a la patria”. Veamos. La colosal deuda pública y las limitaciones a pagar y crecer: De lo dicho arriba se origina el primer imperdonable. Un gasto público que triplica en el quinquenio la deuda sobaer - na, casi toda para sostener una estructura bu - rocrática parasitaria y las no menos impor - tantes oportunidades para pelechar ese gasto en politiquería, subsidios y despilfarro “para - lelo”. El resultado, es una deuda enorme, inlefxi - ble y difícil de manejar que le resta al Estado capacidad de inversión. Un exceso de endeu - damiento que ha reducido y reducirá nuetrsa reputacióndebuenpagado,rdehecho,yael mercado nos trata como país que perdió su grado de inversión. Para recuperar lo perdido tendremos que recurrir a cambios profundos, que nos afetac - rán a todos por un buen tiempo. Manejar el país endeudado hatsa las orejas, no es fácil. La genuflexión ante Panama Ports (PPC). Por años, el Canal de Panamá, con apoyo de los gobiernos, ha intentado sin éxito aumentar el valor añadido de la vía contsruyendo al menos un puerto en el Pacífico y siempre por la oposición férrea y a veces turbia del concesionario del puerto de Balboa, PPC. Hace dos años, y con el vencimiento del contrato de PPC y en oportunidad de su renova - ción, pudimos enmendar el contarto y no solo redimir a favor del país la opción del necesario puerto, pero también que PPC nos dveolviera tierras en el Atlántico a la cual no da ningún uso contractual. Oportunidad dorada única, pero no. Liderado por el egregio Contarlor quien, antes que nadie le preguntaar, dio una evalua - cióndesobresalienteaPPC,elogbiernoreno - vó el contrato, sin cambiarle una coma. A me - nos que un gobierno digno y patriota promue - va una renegociación, tendremos 25 años per - didos de competitividad mientras los vecinos construyen los puertos que debimos tene.r ¡Ay Omar! La victoria pírrica ante la GAFI y la OECD: Por varios años, países que como aPnamá han ofrecido servicios corporativos internaciona - les, sufrieron el embate del primer mundo que intentan modiifcar, a su favor, los regíme - nes de transparencia y ifscalidad. Bien pudi - mos, como todas las jurisdicciones afetacdas, negociar y modificar regulaciones en forma inteligente y mantener un modelo sotsenible. Pero no. De nuestras jurisdicciones vecinas, el úni - co burro de la clase somos nosotros. Es que no solo hemos fracasado en salir adelante si noqueenlopocoquehemosvaanzadohasi - do a costa de castrar y desfigurar las ventajas delajurisdicciónpanameña.uJstoesdecir que el desorden viene del ogbierno Arnulifs - ta. Pero este gobierno y en especial el MEF demostró ignorancia, incompetencia y un desamor por defender nuestra soberanía re - gulatoria y fiscal. Un efecto colateral de no defender nuestro negocio de manera soberana e inteligente es el empapelamiento y la rigidez que ha ido infectando los sectores financieros locales res - tándoles competitividad y rentabilidad. Ahora, para todo hay un papel y los vecinos que antes veíamos como tarasados, se sor - prenden de lo que hemos rterocedido. Aho - ra, ¿quién y cómo rescatamos un sector aun valioso y estratégico? La culposa negación de la rfeorma previ - sional: Desde que el gobierno de Martín To - rrijos pudo, parcialmente, rfeormar el ya de - ficiente sistema de pensiones, ninguno de los siguientes gobiernos cumplió con aportar al menguante sistema exclusivo de beneficio definido (SEBD) la capitalización necesaria, cerca de $500 millones por año. El detalle aborrecible de la atcuación de Nito Cortizo es haberle dado la espalda a cualquier reforma, a pesar de la urgencia. En una pasmosa negación del problema y sus graves consecuencias, el gobierno ha inten - tado ganar prestigio electoral inventando diálogos vacíos para patear la lata. Pero, ¿por qué con tanta deuda contarída, no pudieron siquiear ponerle al Seguro la ca - pitalización que le tocaba y quedar mejor que los gobiernos anteriores? Esos $500 millones anuales, hubiesen aumentado las reservas del fondo de pensiones, más de $2,600 millones, alejando la pesadilla de la insol - vencia, y permitiendo al que viene enfrent,ar con menos presión, los cambios necesarios. Pero no. Había que seguir con el derroche. Continuará. EL AUTOR El autor es presidente de la Fundación Libertad 20 de marzo, oportunidad de la felicidad Reflexión Roberto A. Moreno de León [email protected] Son muchas las personas que quieren estar y ser feli - ces en la vida, pero muy pocas se detienen a reflexio - nar sobre el signiifcado y natura - leza de este anhelo universal. El próximo 20 de marzo se celebra el día internacional de la felicidad (decretado por resolución de la Organizació de Naciones Unidas (ONU) en el 2012), fecha que nos hace una invitación y atento recordatorio a que haga - mos un alto para abordar el tema de la felicidad y dialogar sobre su importancia e impacto en el bie - nestar, calidad y satisfacción de vida no solo a nivel individual, sinotambiénanivelfamilia,rco - munitario,delasociedad,losog - biernos, a nivel nacional y a nivel mundial. A pesar de los grandes avances de la humanidad en diferentes escenarios, en las últimas décadas se ha visto un aumento en casos de estrés, depresión y/o ansiedad. Mucha gente vive infeliz. El mundo es volátil y complejo, el ritmo de vida muy vetriginoso, las problemáticas sociales, educativas, políticas, etc. están muy presentes cada día, sumando la soledad, la confusión y los duros desafíos en la carrera por alcanzar prosperidad y riquezas. Lo ante - rior hace que la felicidad queda rezagada en un último plano. Hay algo más preocupante: muchas veces la búsqueda de la felicidad se concentra en algunos aspectos que no necesariamente nos dan la felicidad genuina: lo material, el éxito, el prestigio, la perfección, la buena vida (que no es lo mismo que la vida buena), el vivir por vivir y de manera muy despreocu - pada, entre otros aspetcos. Esa ex - clusiva búsqueda es equivocada. Muchomásqueteneryhace,rla felicidad genuina se encuentra en el ser…dentro de uno mismo. La felicidad es una combinación entre llevar una vida placen - tera, una vida comprometida y una vida signiifcativa. Paraquelaspersonaslforezca - mos y funcionemos de manear óptima requerimos desarrollar el arte de vivir felices. También re - sulta crucial que aprendamos a afrontarconserenidadyavlorlas múltiples dificultades que se nos presentan en el camino de la felicidad, para así dirigirnos plenos hacia un mejor futuro, siempre con optimismo y sin perder la esperanza ni la fe. Y por supuetso, contar con una formidable red de apoyo familiar y de amitsades. El bienestar y la felicidad son objetivos humanos fundamenta - les valorados y deseados por to - dos. En este día hagamos nuetsro mejor esfuerzo para comenzar a realizar acciones que nos acerquen a esa genuina felicidad que nos llene de dicha, agardecimien - to, gozo, amor y paz. Las personas felices logran darle un sentido de máximarealizaciónasuxeisten - cia. Deseo que no solo pases un feliz día internacional de la felicidad, sino que la felicidad, esa que mereces encontrar, crear y conquis - tar, siempre te acompañe. Vivamos felices de la vida. EL AUTOR es promotor de bienestar y felicidad. Fraude: ¿una denuncia preventiva? Política Raisa Ulibarri [email protected] “Nadiehadudadoaj másconrespectoal hecho de que la verdad y la política no se llevan demasiado bien… ”, escribió Han - nah Arendt en 1971. En época electoral, lasentenciadelaiflósofacobraunbrilloinu - sual. La propagación de falsedades, como la especie de que se oqr uesta un fraude electo - ral, puede ser crucial cuando se trata de una contienda muy reñida. Sin duda alguna, además de deteriorar la deliberación pública, mina la confianza en el árbitro eletcoral. En ocasiones, las estrategias de desinfor - mación para cuestionar futuros resultados son interpretadas como “trucos”, pero no se trata de un juego. En Estados Unidos y en Brasil, países con culturas diferentes, narra - tivas impulsadas a través de medios y redes sociodigitalesabonaronelterrenoparque mandatarios de corte autoritario, frente a números adversos, gritaarn “fraude ”. Aun - que no pudo demostrarse, se sembró la duda y, ante resultados estrechos, mensajes de ac - tores clave impulsaron las acciones desetsa - bilizadoras de grupos radicalizados. Pero la estrategia no solo es usada por quie - nes pretenden retener el poder. A ella tam - bién recurren quienes lo disputan, como el recientemente electo presidente argentino Javier Milei quien aseguró, sin pruebas, que se le habían restado votos en la primear vuel - ta. Lo previsible venía de seguidas: si pierdo en la segunda es poqr ue hubo fraude. En otras épocas, las acusaciones sobre fraude electoral, que se circunscribían a la compra de votos, coacción de votantes, in - consistencias numéricas o altearción de pa - peletas, se producían duarnte o luego de los comicios. Lo novedoso ahora -en tiempos de posverdad- es que las denuncias son “pre - ventivas ”y esgrimidas por quienes temen no alcanzar su meta. Las narrativas de la posverdad se basan en laargumentaciónemocional.aPraexplicar cómo se despliegan, el investigador Ernesto Calvo ha usado como ejemplo un principio dramáticoconocidocomoelarmadehCéjov que reza: “Si en el primer acto tienes una pis - tola colgada de la pared, entonces en el siguiente capítulo debe ser disparda. Si no, no la pongas ahí.”En otras palabras, el fin de es - tas tramas no es convencer sino moviliza.r Un estudio de IDEA Internacional que analizó 53 comicios entre 2016 y 2022 detec - tó estrategias de desinformación en el 92% deellos.Enun33%deloscasos,lostaques comenzaron durante la campaña electoral y las narrativas más comunes fueron las que alimentaban la creencia en un farude. Estas tramas suelen incluir diversos elementos, desde acciones muy precisas hatsa operacio - nes de influencia digital que cruzan el espa - cioanalógico.Esdeci,rabarcantodoeleco - sistema informativo causando un ruido que anula los argumentos. Los órganos electorales desempeñan un papel crucial en la prevención y contención de la desinformación, por ello una de sus tareas más importantes es la supervisión del entorno digital, el lugar (aunque no el único) donde se despliegan etse tipo de estrategias. En su artículo 539, el Código Electoral panameño establece pena de prisión de entre dos a cuatro años, así como la suspensión de los derechos ciudadanos e inhabilitación para el ejercicio de funciones públicas por igual periodo, a quien manipule información en losmediosdigitalesdeformamasiavconel propósito de alterar o afectar la integridad de un proceso electoral. En medio de la campaña, un reciente comunicado del Tribunal Electoral revela su actualización acerca de cómo se urden etass tramas. En una lista exhaustiva sobre con - ductas de manipulación digital se incluyen no solo las más comunes, como la difusión de bulos a través de plataformas mensajería, el uso de bots y la contratación de influenciadores, sino también una muy reucrrida para cazar audiencias radicalizadas: el montaje de sitios web que, fingiendo ser portales de noticias, sin una autoría o dirección editorial clar - mente discernible, se dedican a publicar falsedades y a.propagar teorías conspairtivas. Lamentablemente, lo complicado no es detectar la artimaña y cómo funciona. Lo medu - larradicaenlacontención,enlasanción.aPra ello es esencial identifcar a los actores políti - cos responsables de etsas operaciones, y ha - cerlo es muy difícil por varias razones. No solo porque en el mundo digital lo que parece no es siempre lo que es, sino poqrue para determi - nar con pruebas fehacientes quién etás detrás de una campaña coordinada de inluf encia se necesitan tiempo y dinero. Y es jutsamente esoloque,afaltadeescrúpulos,lessobara quienes las impulsan. Por su importancia para la preservación de la democracia, en los esfuerzos paar detectar y combatir estas acciones no solo debe involu - crarse el órgano electoral, sino el resto de las instituciones democráticas, especialmente los medios de comunicación y periodtiass. Aunque los medios tardicionales se distin - guen por difundir información veriicfada, al tratar de ir a la velocidad de lo digital pudieran contribuir a insetrar piezas en un rompe - cabezas que, como el del farude y la conse - cuente deslegitimación del árbitro eletcoral, luego resulta difícil desarmar. LA AUTORA es periodista, doctora en Ciencias Humanas e investigadora del CIEPS
RkJQdWJsaXNoZXIy MTc3NzU1MA==