4A LaPrensa Panamá, 16 de agosto de 2020 Panorama El Gorgas, entrepandemia, limitacionesydesafíos Científicos del Icges plantean que sus limitaciones son la falta de recurso económico para realizar estudios, y de espacio físico. Las actuales instalaciones del Gorgas datan de 1928. CIENCIA AleidaSamaniegoC.
[email protected] E l Instituto Conmemo- rativoGorgasdeEstu- diosdelaSalud(Icges) cumplirá mañana 92 años de su inauguración, en me- dio de la pandemia de Co- vid-19, operando con un ba- jo presupuesto y con falta de espacio físico para el desa- rrollo de nuevos proyectos deinvestigacióncientífica. Pese a estas dificultades, el desempeñodelGorgashasi- do fundamental en esta cri- sis sanitaria para la optimi- zación de las pruebas diag- nósticas, laevaluaciónydes- centralización del diagnós- ticode casos, además del de- sarrollo de investigación y apoyoconevidenciacientífi- caparalatomadedecisiones en materia de la respuesta delpaís. Los científicos de la enti- dad coinciden en que, histó- ricamente, luegode la rever- sión del Laboratorio Con- memorativo Gorgas a Pana- má, el problema ha sido el bajopresupuesto –lo que di- ficulta la realizacióndeestu- dios–, así como la falta de una nueva sede para incor- porar aunnúmero creciente de investigadores, estudian- tes, pasantes y personal de apoyo a la investigación, con la finalidad de llevar a cabo su trabajo en condiciones óptimas. Lorenzo Cáceres, investi- gador delGorgasdesdehace 22 años, explicó que a pesar de las limitaciones, han en- frentado todos los brotes epidémicosque sehanorigi- nadoenelpaísenlosúltimos 30años. El primer brote fue el rei- nicio de la epidemia de den- gue enPanamá en1993, lue- go de 52 años de haberse re- gistrado por últimas vez un rebrotedel virusDEN-2, en- tre1941y1942. Luego,eliniciodelaepide- miadehantavirusen1999,el brote de encefalitis equina en la provincia de Darién en 2002, la epidemia de H1N1 El Gorgas ha brindado capacitación y apoyo a los laboratorios del país que, junto a él, forman la red de diagnóstico que ha per- mitidomasificar las pruebas de la enfermedadCovid-19. Archivo Oenegés exigenactualizar normas sobre albergues y ejecutar los protocolos deUnicef DERECHOS DELNIÑO OhigginisArciaJaramillo
[email protected] Este año, laSecretaríaNa- cional de Niñez, Adolescen- cia yFamilia (Senniaf) cerró por irregularidades tres al- bergues, de un total de 55 queatiendenaniños,niñasy adolescentes enriesgosocial y que están bajo su supervi- sión. Durante lapresentesema- na, se dieron a conocer su- puestas anomalías en el al- bergue Amor de Damas, en Veraguas, y en el Centro In- tegral Fundación Chilibre Panamá, en Tocumen, don- de hubo aparente maltrato físicoyemocionalamenores deedad. Ante estos hechos, la Fun- dación Unidos por la Niñez, laReddeNiñezyAdolescen- cia de Panamá y la Asocia- ción Panameña para el Pla- neamiento de la Familia En 2009, elMides concesionó el albergue ubicado enTocumen a la FundaciónCreo enMilagros y, en 2019, a la FundaciónChi- libre. Archivo (Aplafa)apuntanaqueelEs- tado, a través del Ministerio deDesarrolloSocial (Mides) y la Senniaf, deben reformar las regulaciones que rigen los albergues y cumplir con los protocolos establecidos para la atención de los me- noresqueallíseencuentran. Jennie Barb, presidenta y fundadora de la Fundación Unidos por la Niñez, mani- festó que en 2012 se elaboró unprotocolodeatenciónpa- ra laniñez en los albergues, a peticióndelFondodeNacio- nes Unidas para la Infancia (Unicef), el cual fue sumi- nistradoalaSenniaf. Este documento es una hoja de ruta sobre cómo tra- tar a los niños, niñas y ado- lescentes en estos sitios de acogida, ya que Panamá es suscriptor de la Convención delosDerechosdelNiño. Como parte de su labor de campo, Barb visitó 11 alber- gues y detectó fallas en va- rios. “Porejemplo,habíauna cuidadorapara56niños,dos niños dormían en una mis- macamay enalgunosnoha- bía buena nutrición”, deta- lló. Barb afirmó que hubo ca- pacitación en el uso del pro- tocolo, para que se estanda- rizara laatencióna los infan- tes, de manera que hasta la cocinerayloschoferesdelal- bergue tuvieron que tomar cursossobrederechosdelni- ño. “El protocolo también im- plicaba supervisióny aplicar de forma aleatoria formula- riosaniñosparaquedierana conocer cómo era el trato dentro del sitio”, destacó la activista, que dijo sentirse decepcionada por la reali- dad actual e invitó a Senniaf a “desempolvar” el protoco- lo. Roderick Chaverri, vice- presidente de la Red de Ni- ñez y Adolescencia, indicó queenestetemahayrespon- sabilidades compartidas, porque la entidad rectora de la niñez es el Mides y el ente coordinador de la ejecución depolíticaseslaSenniaf. “En el casodelMides, ade- más de entregar los subsi- dios anuales a los albergues, también aprueba las políti- cas públicas sobre niñez, mientras que Senniaf se en- cargadequeesaspolíticas se haganefectivas”,explicó. Chaverri consideró que es necesario actualizar el De- creto 26 de 21 de abril de 2009, que regula los alber- gues.Específicamente,sugi- rió calificar el gradode cum- plimiento, para así determi- nar si el alberguepuede con- tinuar operando. Además, cree que debe establecerse unacapacitaciónalpersonal de los albergues y también a lostécnicosdelaSenniaf. Rossana Uribe, presiden- ta de Aplafa, señaló que los cambios deben encaminar- se a aumentar la presencia de personal idóneo de la Senniafenlosalbergues. Sara Rodríguez, directora de la Senniaf, precisó que en el país hay 55 albergues, to- dosmanejados por oenegés, yqueensusupervisiónestán involucrados la Senniaf, los juzgados, la Defensoría del PuebloyelMides. “Esteañocerramostresal- bergues y suspendimos per- misoauno”,dijoladirectora. Añadióqueante losucedi- do en algunos albergues, es- tán en proceso de actualiza- cióndelDecreto26de2009. No precisó detalles sobre lo queseprevémodificar. en2009, el chikungunya en 2014, el zika en 2015 y, aho- ra,laCovid-19. “Cada una de estas epide- mias ha dejado evidenciado quenohayningúntipode li- mitante, encuantoal poten- cial y capacidad del recurso humanoendesarrollarestu- dios y para dar respuesta a los problemas de salud que enfrentaelpaís, encadamo- mento”,manifestóCáceres. Añadió que espera que, una vez superada la pande- mia, exista un mayor apoyo económico por parte del Es- tadoparalaciencia. Presupuesto Por años, el Icgesnoha su- perado los $10 millones anuales de presupuesto. El año que más dinero recibió el institutofue2019, cuando leasignaron$28.6millones, y este año, que le aprobaron $19millones. Originalmen- te, había solicitado $46.5 millones para 2020, pero la Asamblea Nacional y el Mi- nisterio de Economía y Fi- nanzaslorecortaron. En2005, por primera vez, el Icges tuvounpresupuesto como institucióndescentra- lizada, como lo establece la Ley 78 de diciembre de 2003, que reestructura y or- ganizalaentidad.Eseaño,el presupuesto fue de $3.5mi- llones. A pesar de que en los últi- mos años Panamá registró un crecimiento anual cerca- no al 7% de su producto in- terno bruto (PIB), el presu- puesto que se destina a los proyectos de investigación y desarrollo(I+D)esbajo. Datos de la SecretaríaNa- cional de Ciencia, Tecnolo- gía e Innovación (Senacyt) indican que el gasto del país para la investigación cientí- fica y desarrollo de tecnolo- gías representa menos del 0.2% del PIB. En países co- mo Costa Rica y Colombia, la inversión es de 0.47% y 0.3% del PIB, respectiva- mente. Infraestructuraysede El científico del departa- mento de Virología, Jean Paul Carrera, quien tiene 12 años de formar parte del Gorgas, dijo que luego de la pandemia no solo espera que se le asigne más presu- puesto a la institución, sino contar con buena infraes- tructura y tener un sistema eficiente de compras que les permita ser competitivos y eficientes en el desarrollo de investigacionescientíficas. Sobre este último aspecto, Carrera explicó que durante suestadíayestudiosenelex- tranjero, tuvo la experiencia de que comprar un reactivo tomaba un día -desde hacer el pedido hasta tenerlo en la puerta del laboratorio-. No obstante, en Panamá, esa misma acción puede tardar ochomeses. José González Santama- ría, científico del departa- mento de Genómica y Pro- teómica del Gorgas, consi- deróque la instituciónnece- sitacreceryconsolidarseco- mo el principal centrode in- vestigación en salud del país. Sin embargo, para lograr- lo, es necesario contar con el nuevoCampusGorgas y po- der diversificarse con nue- vas líneas de investigación, suficienteespaciodelabora- torio –tanto de nivel de bio- seguridad BSL2 como BSL3–,animalarioyunared de servicios con equipos de última tecnologíaque apoye las actividades de los distin- tos grupos de investigación, detalló González Santama- ría, quien tiene cuatro años enlaentidad. ElGorgas tiene ensus pla- nes laconstruccióndelNue- vo Campus Gorgas desde 2012. Cada año, la falta de presupuesto ha retrasado el proyecto. Elcientíficosubrayóquela pandemia ha demostrado, a nivel mundial, la importan- cia de la ciencia y su poten- cial impacto beneficioso en lasociedad. El deseo de los científicos para este aniversario es con- tar prontamente con una nueva sede, para convertir esta institución en un refe- rente de investigación, a ni- velregionalymundial. “ Un reto del Gorgas es que semantenga vigente en el desarrollo de trabajos de investigación, y que apun- ten hacia la innovación y registro de patentes”. Lorenzo Cáceres, científico del Gorgas. “ Espero que tras la pande- mia, los gobiernos apoyen a las entidades implicadas en investigación en el país, y se financienmás proyectos científicos”. José González Santamaría, científico del Gorgas. Bajo presupuesto Fondo para niñez Uno de los problemas de laSenniaf es la falta de presupuesto. Para este año, por ejemplo, le apro- baron$6.6millones y, de ese total, $6.2millones se va en funcionamiento. El resto, unos $400mil, son para programas de inver- sión en cuidado y protec- ción de la niñez.